Helldivers 2 rompió todo tipo de expectativas para transformarse en la gran sorpresa de este 2024, ¿por qué no podemos dejar de hablar acerca del nuevo juego de Arrowhead?
En un presente saturado de lanzamientos de forma constante, hay un enorme desafío por parte de las desarrolladoras: lanzar un título que sea atractivo desde la propuesta, divertido en lo jugable y sostenible en el tiempo. Es probable que Helldivers 2 tuvo un plus de ser publicitado por la mismísima Sony, pero cuando un juego trasciende la “cuarta pared” y se convierte en tema de conversación recurrente en redes sociales y foros, incluso para aquellos que no lo juegan, es cuando el título ya cumple ese objetivo propuesto.
Y acá tengo que ser un poco auto referencial para dimensionar el impacto que tuvo este lanzamiento que no inventa la rueda ni propone algo 100% innovador: hace más de 10 años que un título online (sacando FIFA, Mortal Kombat o Street Fighter) me generaba un atractivo lo suficientemente grande como para querer pasar todo el día jugándolo; o peor aún, despertar algún grado de frustración cuando la capacidad de los servidores se vio sorprendida y saturada por el cúmulo de jugadores, tanto de PlayStation 5 como de PC, que intentaban ingresar en simultáneo.
Es que Helldivers 2 sorprendió a todos, incluso a la propia Arrowhead. Con varios records superados de concurrencia y jugadores en Steam, esta secuela de la franquicia PvE es un paso de confianza para Sony que quiere insertarse con peso dentro del mundo de los juegos como servicio.
Repartiendo Democracia a través de la galaxia.
Si han visto memes y clips en redes sociales, se habrán dado cuenta con facilidad el parecido que tiene Helldivers 2 con Starship Troopers, la película (¿ahora de culto?) dirigida por Paul Verhoeven. El absurdo, lo clase B y lo fascinante de este universo con una narrativa a cuentagotas es lo suficientemente sencilla y disparatada para que encaje en una dinámica de juego simple para disfrutar.
La Supertierra no tuvo mejor idea que ponerse en contra de toda la amplia galaxia, y es nuestro debe como Helldiver, soldado de élite, desplegarse a lo largo y ancho de los diferentes planetas para garantizar nuestra supervivencia. Una verdadera sátira con propaganda cuasi fascista y unos diálogos que complementan ese absurdo que constantemente buscan ponernos como patriotas defensores del bien y no como unos colonizadores que justifican la guerra para explotar los recursos de cada planeta y, de paso, exterminar cualquier hostilidad presente.
En esta primera etapa del juego, el amplio mapa de la galaxia está dividido en dos grandes facciones: mientras que la Supertierra está curiosamente en el centro, del lado derecho tendremos un sistema planetario habitado por los Termínidos y a la izquierda por los Autómatas.
Del costado derecho, los Temínidos son bichos de todo tipo de tamaño y vehemencia. Son fuerza bruta pura y son la parte más parecida a las fases de acción de Starship Troopers. Esta suerte de langostas gigantes con varias tipos de esbirros son fuerza pura en movimiento: donde la cantidad de sus tropas superan en número a nuestro pelotón en oleadas de 10 a 40 enemigos. Los Autómatas, por su parte, son cyborgs dominados por inteligencia artificial: lo más parecido que vamos a ver de Skynet pero ahora en un modelo interplanetario. Entre sus filas contaremos con fábricas que fabrican robots bípedos de diferentes tamaños mezclando armas de fuego y espadas, pero también montados en vehículos bipedos (similares a los At-At de Star Wars) Un ejercito un tanto más lento pero completamente letal a cualquier distancia porque tiene un total manejo de las armas de fuego.
Entre tanta hostilidad estamos nosotros: los repartidores de Democracia. En Helldivers 2 podemos jugar partidas de entre 1 a 4 jugadores con una premisa simple: ir a una región de algún planeta y cumplir el objetivo que se nos propone. La variedad acá siempre estará´dependiendo del tipo de región a la que visitamos. En los planetas con Termínidos, tendremos que destruir nidos de bichos, cazar algunas criatura gigante, recuperar información de un puesto de avanzada, recolectar información, conectar alguna antena de comunicación, entre otros. Del lado Autómata, pasa más por la liberación de rehenes, destrucción de fábricas de robots, resistir las oleadas enemigas, entre otros.
En este comienzo, puede que Helldivers 2 todavía no tenga una diversidad de objetivos, pero sus diferentes planetas y su adictiva jugabilidad por ahora anestesian esta ausencia. Lo bueno es que Arrowhead ya confirmó que se sumarán nuevas regiones, criaturas, armas y objetivos con el correr de los meses. Esto es clave para la vida útil y sostenimiento ante el paso del tiempo, pero de vuelta, esta juego tiene la bendición de ser una fiesta, la cual estamos todos invitados.
Si bien podemos explorar los planetas en solitario, la magia de Helldivers 2 llega con las incursiones con varios jugadores. El sistema de juego es fácil y entra en un tutorial de 15 minutos: tenemos un arma principal, una secundaria, granadas, apuntar a los enemigos y avanzar. Esta primera capa introductoria es su abc, con una sensación en los controles completamente arcade. No busca tanto la perfección técnica o el uso calibrado de las armas: el disfrute pasa por vaciar cargador tras cargador defendiendo a tus amigos o haciendo de héroe por un rato.
La frutilla del postre que complementa la experiencia jugable son las estatagemas, un apoyo aéreo que recibimos desde la nave principal que permite ofrecer un plus de estrategia a las incursiones que hacemos. Las estatagemas pasan desde ataques aéreos de diferentes tipos de potencia hasta la asistencia de municiones, armas especiales y elementos de soporte, como una lluvia de minas, o ametralladoras automáticas que disparan ante la presencia de movimiento enemigo.
Cada estatagema se activa con una combinación de flechas y tiene un cooldown para usarse cada limitada cantidad de tiempo; son recursos completamente espectaculares y que cambian el curso de las misiones de un momento a otro, para bien o para mal, ya que el fuego amigo activado puede terminar resultando un arma de doble filo con decisiones incorrectas.
Hay 9 dificultades diferentes y lo que cambia, además de la agresividad y resistencia enemiga, son las bonificaciones por cumplir objetivos y los recursos que abundan en cada planeta, que funcionan como las diferentes aristas económicas dentro del juego. Con las medallas que ganamos por cumplir objetivos, recursos de los planetas y experiencia de cada misión, vamos a poder desbloquear nuevas armas, armaduras y desbloquear/mejorar nuevas estratagemas para volvernos cada vez más poderosos. Hay un invitación constante dentro del Helldivers 2 de arriesgar un poco más de la cuenta (con dificultad y exploración del escenario) porque el riesgo/recompensa de cada zona es atractivo para apelar a la codicia.
Dependiendo el tipo de misión, tendremos un contador de tiempo para completarla que va variando entre los 10 a 40 minutos. Esto permite, además de cumplir el objetivo principal, explorar un poco la zona disponible para recorrer y salir en búsqueda de recursos y también de cumplir objetivos secundarios, que amplían los beneficios recibidos por misión. Como dije, es un arma de doble filo, porque una oleada enemiga que nos juegue una mala pasada y podemos perderlo todo. Contamos con una limitada cantidad de veces para revivir (es una estatagema que tiene también uso limitado y también un cooldown de dos minutos cuando ya agotamos todas las disponibles).
Uno de los aspectos que más me gustó del online y cooperativo en este PvE es que en el mismo grupo puede jugar alguien de nivel 1 con gente de nivel 20. ¿Por qué? Porque los soldados del pelotón usar las Estratagemas de recursos y compartirlas con sus camaradas. Por ejemplo: si uno de los jugadores tiene desbloqueado armas anti tanque de apoyo, puede solicitarla y ofrecerla a un compañero. Este tipo de cosas refuerzan el concepto de poner la diversión y el disfrute por sobre la competencia; esa “camaradería” es el mensaje subliminal que reparte la propaganda de la Supertierra: solo si nos unimos podremos vencer al enemigo (el enemigo = cualquier ser que no sean los humanos).
Audiovisualmente hay sensaciones encontradas. A nivel gráfico, no estamos ante un potente título de la actual generación de consolas pero esto también se contrapone con la variedad de planetas, sus diferentes biomas y la exploración de cada una. Me gustaría ver más y más clases de enemigos en los próximos meses para sumar una cuota adicional de color a los enfrentamientos. Lo que sí es un plus es la banda sonora, repleta de trompetas y música bélica, y las voces de los Helldivers, que aportan esa cuota de valentía mientras despachan plomo contra los enemigos.
Conclusión.
2024 ya había arrancado muy bien en materia de videojuegos, pero Helldivers 2 es la verdadera sorpresa de este comienzo de año. Si mantiene la llama encendida con contenidos atractivos, con estabilidad en los servidores y escuchando a la comunidad (algo que Arrowhead viene haciendo desde su lanzamiento), estamos en presencia de un tíulo como servicio que se mantendrá activo por varios años.
Lejos de hacer futurología, es probable que también se encuentre en varios rankings de mejores juegos del año. Es fabuloso lo que hace con tan pocas mecánicas a nivel jugable, donde queda en evidencia esa pasión por hacer una propuesta realmente divertido y que se disfruta el triple cuando podés compartir sesiones con amigos. Helldivers 2 tiene una baja barrera de inmersión para jugadores con poca experiencia en PvE y abraza también a los expertos dentro del género. Esta aventura no deja afuera a nadie, necesita de todos los Súper Soldados posibles para defender la galaxia de todas las amenazas que se presenten.
Helldivers 2 logra lo que cualquier juego online se propone antes de su lanzamiento: brindar partidas memorables, disfrutar con amigos o extraños y pasar horas sencillamente jugando a algo que es realmente divertido.