El universo de This is the Police se expande con Rebel Cops, una aventura de estrategia por turnos con mucho sigilo y acción, bajo una dificultad desafiante.
Los spin-off no suelen ser frecuentes en el mundo de los videojuegos. Si bien hay algunos exponentes (podemos mencionar por ejemplo franquicias importantes como Mario, Pokémon o Mega Man), es más común hablar de secuelas o precuelas, que continúen una linea de desarrollo.
Bajo esta premisa, THQ Nordic decidió expandir el universo de la saga This is the Police 1 y 2 con Rebel Cops, una aventura de estrategia por turnos que reduce parte de su carga argumental para involucrarse directamente en el diagramado de las misiones, donde el sigilo y la buena distribución de nuestros honestos policías será la clave en un título de ejecución muy sencilla pero una dificultad bastante ajustada.
A la caza de Víctor Zuev
Rebel Cops deja de lado ese planteamiento moralista que buscaba borrar esa linea entre el deber y lo ilegal que relucía This is the Police para plantearnos un argumento con una impronta bastante similar a Los Intocables, la famosa película de Brian de Palma basada en el libro homónimo.
La ciudad de Ripton se encuentra reinada bajo la tiranía de Víctor Zuev, un mafioso que no solo tiene sometida a toda la región con sus negocios y aprietes, sino que también tiene en el bolsillo a la policía y gran parte del sistema judicial, pudiendo ejercer su poder a lo ancho y largo de toda la región. Su influencia parece imparable y la mayoría hace la vista gorda para no tener que sufrir ninguna consecuencia.
Por suerte, un puñado de policías decide exiliarse de dicha burocracia corrompida y arman un grupo que intente poner punto final al imperio de Zuev. Refugiándose en el bosque y viviendo en una van destartalada, comenzarán a desbaratar la banda criminal atacando diversos puntos estratégicos y al mismo tiempo ayudando a los ciudadanos que gracias a nuestra injerencia comenzarán a abandonar el miedo sumándose a la causa, ya sea desde la acción física hasta aportando suministros.
Debido a su acople al imaginario de This is the Police, Rebel Cops es un universo mucho más pequeño, en el que no tenemos nombre y apellido para los protagonistas sino que los personajes que se van sumando a nuestras fuerzas son completamente random, sacándole parte de peso narrativo a la historia y haciendo del grupo de “policías rebeldes” algo más impersonal, sin intentar crear ningún vínculo más que de los informantes o asistentes que sí tienen una relación más directa dentro del juego.
Con el fin de acabar con Zuev, recorreremos diversas locaciones dentro de Lipton: bancos, mansiones, casinos, comercios y refugios; y su tamaño va cambiando considerablemente sin importar el grado de dificultad: tendremos amplios espacios para recorrer o asentamientos más chicos en los que variarán la cantidad de objetivos a cumplir y los enemigos que irán apareciendo.
Una jugabilidad simple en medio de una ejecución compleja
El breve tutorial, ambientado en un banco donde tendremos que mediar en una toma de rehenes, funciona para darnos cuenta que el juego no consta de profundas mecánicas. En cada nivel podremos llevar hasta 6 policías, y si bien cuentan con una progresión de nivel que mejorarán su precisión, el rango de movimiento o la fuerza para llevar objetos (ojo que si mueren hay permadeath), la diversidad de cada uno residirá en el equipamiento que les coloquemos para la misión y ahí es donde surge gran parte de la magia de este título.
En otros exponentes del género (X-COM, Mutant Year Zero, Age of Wonders, Atchung!, entre otros), la acción suele ser preponderante y generalmente podemos despachar munición a diestra y siniestra. Sin embargo, en Rebel Cops la escasez de recursos será una constante, al punto de que si no hacemos bien las cosas algunos de nuestros personajes vayan sin armas o sin ningún tipo de protección, ya sea casco o chaleco; y eso es algo a tener en consideración también ya que un disparo certero puede dejarnos fuera de combate automáticamente.
Es por eso que el sigilo y la prudencia son factores que van por encima de la locura intempestiva de querer llevarnos los objetivos por delante eliminando a todo lo que se nos cruce. De hecho matar no es ni la única ni la mejor opción, ya que al ser policías que intentan seguir el ritmo de la ley; mientras más sigilosos seamos y menos llamemos la atención, obtendremos más puntos arrestando criminales que pegándoles un tiro en la cabeza, amén también de que evitaremos alarmar al resto de los enemigos.
El planteamiento de los objetivos suele ser bastante convencional: tendremos que arrestar o eliminar a determinado miembro de la banda de Zuev o robar tanto información como recursos.
Cada misión cuenta con sus propias tareas alternativas que permiten aumentar las bonificaciones y que podremos optar por realizar o no antes de comenzarlas (ojo que si nos las cumplimos afectará negativamente nuestra reputación); pero además cuentan con varios scripts (muchos se activan si tardamos demasiados turnos en cumplir los objetivos) que saltea las normas establecidas; como puede ser que aumenten los refuerzos o determinados enemigos cambien sus patrones de movimiento, modificando la ecuación de nuestras acciones brúscamente, por lo que será vital tener una cuantiosa prudencia antes de escabullirnos en casas o doblar en alguna esquina, porque un paso en falso equivale a perder uno de nuestros valientes policías.
Los escenarios suelen ser bastante diferentes entre sí, y si bien su estética minimalista a veces no ayuda a matizar esa diversidad, nunca sentimos que estamos repitiendo una locación, ya que además va alternando entre el día y la noche. Al utilizar un panorama cenital, siempre tendremos un claro control de nuestros movimientos y la distancia que estamos de una cobertura o un objetivo. Hay un problema que incomoda por momentos y es que no podemos rotar la perspectiva de la cámara, y en algunas situaciones se puede prestar a confusión si estamos cubiertos o a merced de la vista de los enemigos.
Al margen de la campaña se irán desbloqueando sidequest para aumentar nuestros recursos, que en determinadas instancias serán casi obligatorias de realizar para, además de subir de nivel con determinado personaje que queramos, reabastecernos y conseguir dinero para comprar recursos en el mercado negro. Un detalle no menor es que los personajes al finalizar una misión estarán cansados y sus estadísticas se verán reducidas, asi que cumplir con las secundarias también funcionan para darles algún que otro descanso para cuando la situaciones sean más complicadas.
Al tratarlo como un spin-off, Rebel Cops puede resultar un tanto corto y si bien cuenta con 3 niveles de dificultad que pueden modificar el tiempo que nos lleve cada nivel, podemos superarlos tranquilamente en unas 10 horas.
Manteniendo la estética
Rebel Cops imita la estética, impronta de This is the Police, por lo que audiovisualmente respeta ese estilo minimalista y visualmente atractivo. Lo que sí mejora es la calidad de la interfaz y un pequeño pulido en los menúes, haciéndolos más prácticos e intuitivos.
El único defecto notorio dentro de las misiones, al menos utilizando un joystick, es la incomodidad para seleccionar items y personas para interactuar, resulta poco intuitivo e incómodo.
Conclusión
Directo al hueso, conciso y al mismo tiempo desafiante. Rebel Cops es un juego pequeño, con todo lo que conlleva caraturarlo como un spin-off, pero es una variante interesante dentro de los títulos de estrategia por turnos, que no apuestan a una acción desmedida sino a un planteamiento de David contra Goliath, en el que ser sigilosos siempre termina siendo la mejor opción..