El reboot de Ghostbusters le estaría generando pérdidas a Sony Pictures en todo el mundo, y su director, no quiere saber nada con seguir haciendo remakes. ¿Chau secuela?
Hace unas semanas, cuando en Sony todo era entusiasmo y esperanza, se anunció que muy probablemente, la nueva película de Cazafantasmas tendría una continuación. Y el encargado de tal afirmación, fue ni más ni menos que su presidente, Rory Bruer, quien declaró: “No es oficial todavía, pero no me cabe la menor duda de que tendremos una secuela”.
Pero hoy en día, las críticas negativas y una bastante baja recaudación a nivel mundial, podrían desestimar la idea de una nueva historia. Y esto se puede corroborar claramente, cuando se dan a conocer números más que preocupantes: la cinta podría generarle pérdidas a Sony por más de 70 millones de dólares.
Si a esto le sumamos las últimas declaraciones de Paul Feig, director del film, el futuro de la franquicia se hace todavía más penumbroso. En una entrevista concedida a The Huffington Post, y ante la consulta sobre una secuela, afirmó: “No, no. No lo haré”. Sin dudas, una respuesta muy tajante.
De todos modos, quedará por ver si la película logra buenas recaudaciones en otros países, donde todavía no fue estrenada, y si eso le da un empujón anímico (y sobre todo, económico) a Sony Pictures, como para apostar por una nueva entrega.
Ahora, si el proyecto finalmente resulta un fracaso… ¡¿a quién van a llamar?!