Blood Bowl 2: Legendary Edition es un juego complejo y ridículo que exige demasiado para lo que nos ofrece.
Si los nerds y los bullies formaran una alianza, Blood Bowl sería el resultado de una extraña noche de borrachera entre ambos bandos. Y uno bastante redituable, porque la saga (que actualmente tiene 30 años) todavía sigue lanzando contenido en forma de juegos de tableros, o inclusive videojuegos, como el Blood Bowl 2, que la semana pasada sacó su Legendary Edition.
¿Qué es Blood Bowl? Bueno, es un juego de rol que incorpora las reglas del futbol americano al mundo Warhammer (con todo lo que esto implica: magia, orcos, elfos, gente arrancándose la cabeza). La gracia dentro del juego es la posibilidad de que los personajes puedan atacarse en el campo de juego – es decir, arrancarse la cabeza literalmente – y así generar oportunidades para hacer un touchdown.
Blood Bowl es muy particular porque es muy fácil que la barrera cultural nos impida conocerlo mejor (tanto por el futbol americano, como por su esencia rolera), pero una vez que la pasamos vamos a encontrarnos con un juego con una gran profundidad y que, teniéndole paciencia, puede atraer a cualquier amante de los juegos de estrategia. Y hablo de paciencia porque las partidas son largas: aún jugando contra la máquina, un match puede durar cerca de unos 40 minutos.
Entonces, ¿Qué tiene de especial Legendary Edition? Esta versión incluye todos los DLCs (nuevas razas con quien jugar, mapas, etc.) y algunas mejoras, pero no trae grandes cambios al juego base, lo cuál es una oportunidad perdida.
El principal problema de Blood Bowl 2 es que no es noob-friendly. Para los que seamos nuevos en la saga, el juego ofrece nos ofrece dos formas de aprenderlo: un modo campaña a modo de tutorial en el que conoceremos la historia del equipo humano, y los aspectos de la mecánica de a una partida por vez. Sí, entre 30 y 50 minutos para desarrollar un aspecto del juego, como la posibilidad de movernos y atacar en un turno (un movimiento llamado Blitz), o las distintas habilidades de los personajes.
La otra forma de conocer el juego es a través de un manual online (cuando elegimos verlo en uno de los menús, nos abrirá una ventana del explorador). Siguiendo la tradición del rol, el manual nos da información sobre todas las reglas, pero creo que Games Workshop podría haberlo incluido a modo de un tutorial más desarrollado. El mundo de Blood Bowl es tán ridículo que justificar una serie de partidas que nos enseñen lo básico se podría haber justificado más que una campaña entera de casi 10 horas.
Esta ridiculez es muy importante para que Blood Bowl 2 funcione a pesar de sus fallas. El humor tongue-in-cheek; los relatores principales del juego (un orco y un vampiro) y sus comentarios sarcásticos; las referencias pop (la de un tal Diegi Maratona adicto a la caña de azucar, ejem); o la posibilidad de que el público entre al campo y deje tirado a varios jugadores durante un partido. Todos estos aspectos hacen más llevadero lo que podríamos resumir en un juego mental: Blood Bowl es como un ajedrez en el que otros peones pueden entrar a pegarle trompadas a tus fichas.
Cuando pasamos el tedio del tutorial (en realidad podemos hacerlo desde el minuto 0) es cuando nos encontramos con la parte más interesante de Blood Bowl: el modo online. Todo el potencial del juego sale a la luz cuando podemos customizar nuestro propio equipo, nos enfrentamos con otro competidor, y cuando el aspecto estratégico se nota. En el modo online también podemos entrar a campeonatos, o ver partidas de otros jugadores a modo de replay. Un aspecto que no hay que dejar pasar es que dentro del mundo del rol, Blood Bowl es de los juegos más estrictos por tomar un deporte como referencia. Si bien lo lindo de rolear muchas veces implica la espontaneidad , es probable que los amantes de los juegos rigurosos puedan apreciar más el estilo que plantea esta saga.
Blood Bowl pide mucho esfuerzo por parte del jugador para poder incorporarse a él, y lo hace de una manera tediosa. Pero si te gusta la estrategia, o pensás que a tus partidas de ajedrez en la plaza o en el club les falta más sangre, Blood Bowl 2: Legendary Edition es para vos.