El mono más famoso de Nintendo hace su reciclado regreso en Donkey Kong Country Returns HD, uno de sus grandes éxitos de los últimos veinte años con detalles nuevos de chapa y pintura y jugabilidad inagotable.
Sería mentira decir que no hay nada nuevo bajo el sol de la jungla de Donkey Kong. Fanáticos de la segunda mascota de Shigeru Miyamoto sabrán de la inmersiva experiencia recientemente abierta en Universal Studios Japón (próxima a desembarcar en Estados Unidos en 2025) que permite a los visitantes del parque ingresar a los paisajes tropicales de la franquicia y hasta interactuar con el primate. Más aún, Donkey Kong hizo su estelar aparición en la película de su frienemy Mario en 2023, y su continuidad como personaje de animación está más que asegurada. Sin embargo, en el flanco de los videojuegos, se acumulan años sin un juego 100% original basado en Kong y kong-pañia.
Los esperanzados de siempre no abandonan sus ilusiones de un retorno triunfal del gorila luego del anuncio de la Switch 2, pero, de momento, la última noticia relacionada es la del lanzamiento de Donkey Kong Country Returns HD, el juego que capitalizó la tradición plataformera de la franquicia para dar el salto a la Nintendo Wii allá por 2010. Se trata del segundo estreno recauchutado para la Switch, puesto que en 2017 tuvimos la oportunidad de jugar a la secuela del juego que cubrimos hoy, Donkey Kong Country Tropical Freeze, otro remasterizado, pero de la Wii U. En este lanzamiento desordenado digno de George Lucas, supimos conseguirnos refinadas versiones de los ya clásicos Donkey Kong Countries de Super Nintendo, aprovechando los avances tecnológicos de cada nueva consola.
Tenemos, entonces, un acierto de hace quince años de Nintendo haciendo un regreso por segunda vez (valga la redundancia en el título), en el tantas veces discutido otoño de la Switch. ¿Cómo juzgar el refritado de las sobras? Veamos qué tiene para ofrecernos Donkey Kong Country Returns HD casi dos décadas después de su llegada al mundo de las consolas.
El triunfal regreso (del regreso) de Donkey Kong
Donkey Kong tiene una triste paradoja: son pocos sus juegos olvidables, pero sus entregas tampoco son tantas (al menos comparado a otros personajes igualmente memorables como Link de Zelda o Kirby). Virtual invitado inevitable de cualquier Mario fuera de su elemento, la teoría dice que nuestro gorila favorito es una de las franquicias más importantes. Sin embargo, en la práctica, contamos con un puñado de hits de nuestro orangután preferido dispersos por varias generaciones de consolas. Es por eso que Nintendo probablemente haya optado por transportar uno de los hits de Nintendo Wii en una de sus consolas más exitosas. Aquel juego de 2010 era un rescate emotivo de algunas de las grandes ideas de la trilogía Donkey Kong Country de Super Nintendo.
En efecto, Donkey Kong Country Returns HD (DKCRHD) es un compendio de todo lo que quieren los fanáticos de la saga. Estructurado en forma de plataformero preciso, el jugador toma control del aguerrido Donkey Kong, con la opción de sumar a su compañero Diddy en modo cooperativo o como soporte del juego en solitario. Saltando de plataforma en plataforma, los protagonistas atravesaran islas, mundos acuáticos, templos abandonados, minas de carros de saltarines y todos los clásicos espacios a los que los fanáticos de la franquicia están más que acostumbrados. En ese sentido, DKCRHD se siente más como un gusto conocido con destellos de pequeños aditivos que amalgaman perfectamente con la mezcla original.
Dentro de lo reconocible está tanto la jugabilidad ajustada como la vistosa (y armoniosa) estética. Jugar a Donkey Kong requiere afinar nuestras habilidades plataformeras, y sin ser un juego especialmente difícil, esta bien dotado de pequeños desafíos de destreza. Un milímetro menos en un salto puede hacerte repetir un nivel entero. Sonará frustrante, pero a su vez se trata de lo que ha hecho a la franquicia popular. En la misma línea estan los interminables coleccionables. Monedas, letras KONG, piezas de rompecabezas, todas están de vuelta para el agrado de los amantes de completar juegos al 100%. En lo audiovisual, las partituras de Donkey Kong Country son auténticas obras maestras. El compositor Kenji Yamamoto, figura clave de las melodías de Nintendo, evoca los compases más reconocibles de David Wise, el autor de las tonadas más pegajosas del simio, y las extiende sobre los nuevos territorios que propone DKCRHD.
La media vuelta del gorila
Donkey Kong Country Returns HD, pese a su nueva capa de chapa y pintura, se siente un tanto a mitad de camino. Sorprende para mal en pequeños tropiezos como tiempos de carga lentos, torpezas de cuadros por segundo y desprolijidades visuales ocasionales. Lo que en Wii podía dejarse pasar por el factor novedad y una potencia maquinal que no era suficiente para darle al mono su máximo esplendor no se explica quince años después con un puerto a medias en una consola que, si bien ya está de salida, debería haber corregido esto sin grandes percances.
Los primeros traspiés se encuentran en las pantallas de carga. Si bien podríamos decir que es subjetivo, entrar y salir de un nivel puede demorar un tiempo no desestimable, algo difícil de entender de un juego de hace una década y media en una consola más pudiente. Las malas cargas a veces están acompañadas de algunos errores visuales que por suerte se corrigen sobre la marcha. Aún más infrecuentes son los mínimos desajustes de botones que puede dar algún que otro dolor de cabeza, pero esos hablan más de la necesidad de un nuevo videojuego en la franquicia que otra cosa. Incluso, Donkey Kong Country Returns HD ofrece jugar con controles de movimiento para emular las viejas glorias de la Wii, pero en la práctica, es una experiencia que mejor cruzar como un plataformero tradicional. La lección después de tantos años es una: menos es más.
¿Volver o no volver? Esa es la cuestión
La novedad no acompaña a Donkey Kong Country Returns HD. Esto, lejos de ser un defecto en sí mismo, puede resultar menos atractivo para algunos jugadores, especialmente aquellos con la suerte de haber experimentado su versión original. Revisitarlo resultará oportuno para amantes de la franquicia o de un un plataformero que poco envejece con el paso del tiempo. Sin embargo, dentro de los miles remasterizados de Nintendo, este cae entre los más intrascendentes por su poca renovación y timing. Sería justo decir que fórmula ganadora no se toca, pero un juego reciclado y lanzado el mismo día en que se anuncia la sucesora de la Switch habla más de una baja prioridad del primate dentro de las ventas de Nintendo que de un intento por revalidarlo. Nada de ello quita mérito a un juego que mantiene una nobel vigencia y que, pese a su precio de triple AAA algo desconcertante para un remaster, sigue siendo una escuela de género que muchos otros siguen imitando y homenajeando al día de hoy.
Las miradas conspicuas de internet han dado con un rediseño de Donkey Kong ante el inminente anuncio de Mario Kart 9 para la Nintendo Switch 2. Las viudas del mono podrán ilusionarse con la idea que este lavado de cara del simio puede ser la antesala de un verdadero Donkey Kong nuevo como Dios manda, pero hasta tanto, pueden entretenerse con un clásico moderno de la franquicia que no defrauda en tanto plataformero afinado cual violín. Ya vendrán tiempos mejores para el gorila, pero su potencia radica en que su humilde pero robusta tradición de excelentes aventuras en 2.5 D. Es poco lo que Donkey Kong Country Returns HD hace mal, aun cuando su poca renovación se nota, por lo que el piso es alto aun cuando el techo de la jungla es bajo. Al fin y al cabo ¿qué se puede esperar del Donkey más que un plataformero genial?
Es difícil evaluar a Donkey Kong Country Returns HD fuera del contexto poco auspicioso de la franquicia. Su jugabilidad está prácticamente intacta y el entretenimiento está asegurado, pero su apabullante falta de novedad y poco horizonte de renovación para la saga le quitan brillo a un excelente juego de hace quince años con nueva capa de chapa y pintura. Esperemos que este post envejezca rápido y pronto estemos celebrando el anuncio de un nuevo Donkey Kong mientras jugamos a esta entretenida entrega a modo de preparación.
