Hangar 13 y 2K Games nos entregan Mafia III, la tercera parte de una saga que, por sí sola, pone la vara en lo más alto a la hora de crear expectativas. ¿Logró satisfacerlas? Te lo contamos en este análisis.
Por lo que dejaron sus antecesores, Mafia III tenía que venir bien dotado para poder cumplir con lo que se esperaba de él. En ello han trabajado mucho desde Hangar 13, que nos trasladan, en este caso, a New Bordeaux (la versión ficticia de Nueva Orleans) para toparnos con problemas entre las diferentes mafias del lugar, mientras convivimos con la violencia y el racismo de la época.
La historia del título nos pone en la piel de Lincoln Clay, un ex combatiente de la guerra de Vietnam, que no tarda mucho en ser traicionado por la mafia italiana. A partir de ahí comenzará una trama de venganza, enredos policiales, corrupción y mucha, mucha violencia. Entre balas, deberemos hacernos algunos aliados para conseguir nuestro fin.
¿Qué podíamos esperar de esta historia? Mucho, y Mafia III cumple y de sobra. Las dos primeras entregas de la franquicia habían dejado en claro que lo que se cuenta en ellas no es un detalle menor. A pesar de alejarse bastante del clásico papel del tipo que poco a poco se sumerge en una familia mafiosa, en la piel de Lincoln Clay transitaremos por hechos emocionantes que están a la altura de lo esperado y que nos envolverán para que tomar parte del asunto sea algo que nos provoque profundos deseos.
¿Qué podíamos esperar de esta historia? Mucho, y Mafia III cumple y de sobra.
Claro que para cumplir los objetivos que se nos van planteando tendremos que completar misiones. Y es ahí donde uno de los principales problemas del título aparece. Durante las primeras horas del juego todo marcha bien, pero poco después notamos que las cosas siguen iguales, exactamente iguales. Y es que durante las más de 35 horas que dura la obra deberemos asesinar a los jefes y subjefes de la mafia italiana y, para ello, tendremos repetir una y otra, y otra, y otra vez exactamente las mismas secuencias: interrogar, robar, seguir y matar. Hay que decir que llenar tantas horas no es fácil, claro, pero nada justifica que en este título tengamos que hacer lo mismo durante casi su totalidad. Decir que es repetitivo, hasta parece poco.
Pero Hangar 13 ha tenido su pequeño bote salvavidas y es la acción y las secuencias de violencia con que llevaremos a cabo estas misiones. Esto no quita que nos cansemos, por momentos, de afrontar siempre las mismas situaciones, pero la forma en qué podemos ejecutar a nuestros enemigos, tanto en sigilo como a plenos disparos, resulta realmente muy satisfactoria, desde la jugabilidad hasta la parte visual. Lincoln Clay no tarda en demostrar todo su aprendizaje militar y en hacernos sentir realmente poderosos con un arma en la mano.
Y nuevamente, para un punto positivo encontramos uno negativo. Algo que le resta gran atractivo a los combates es la IA. Los enemigos no solo son torpes con las armas, sino que no demuestran gran valor por su vida arremetiendo contra tu personaje y quedando completamente a merced de tu poder para matar.
Tendremos que completar misiones […] para ello, tendremos repetir una y otra, y otra, y otra vez exactamente las mismas secuencias
Lamentablemente, este no es el único problema técnico que padece Mafia III. Posiblemente se trata de uno de los lados más flojos del juego. A lo largo de la aventura nos encontraremos con todo tipo de fallos: Glitches, problemas de carga del mapa, algunos huecos en el doblaje y hasta bugs que nos obligarán a reiniciar misiones. A esto, sumémosle que el título no cuenta con un apartado gráfico que sume puntos. Claro está que debemos tener en cuenta que es un sandbox, y como es lógico no es un género que suela estar acompañado de un nivel visual extraordinario, pero si pensamos que estamos en una nueva generación ya avanzada, podría esperarse un poco más. Este conjunto es realmente una involución respecto a sus antecesores.
Otro punto en el que da marcha atrás es en la personalización. Puede parecer tan solo un detalle, pero si recordamos que Mafia II contaba con una mínima gama de accesorios personalizables y que es una posibilidad que no falta en los títulos del género hoy en día, ver a Lincoln Clay atravesar toda la historia con un mismo aspecto y la inexistente posibilidad de modificarlo puede resultar un tanto frustrante.
Bien, pero paremos un poco que no todo es negativo en el lanzamiento de Hangar 13. Hay varios factores que se han lucido y uno de ellos son los personajes. Los principales como los secundarios están trabajados en profundidad, tanto en su estética, como en su personalidad y en los diálogos que presentan. Gracias a ellos presenciaremos cinemáticas excepcionales dignas de la gran pantalla.
Otro punto que sube el nivel de Mafia III es la recreación de Nueva Orleans (llamada New Bordeaux). Recorrerla realmente es un placer, tanto en su variedad de territorios como en la perfecta y más que trabajada ambientación de finales de los años 60. Todo esto, acompañado por un clima que cambia constantemente y que, en la mayoría de sus estados (no en todos), está muy bien logrado. Es una pena que habiendo recreado tan bien una ciudad, el 95% de las misiones sean en interiores.
Finalmente, dentro de estos elementos positivos a tener en cuenta, está la tan esperada banda sonora. En lo que es a efectos de sonido no hay nada que reprocharle, pero el diamante en bruto de la obra, como era de esperarse, es la selección musical. Cada una de las tres radios está repleta de hits de la época, que aportan un clima estupendo al andar del juego. Además, algunas colocaciones forzadas de pistas, en momentos concretos nos regalaran escenas realmente memorables.
El diamante en bruto de la obra, como era de esperarse, es la selección musical
Concluyendo: Mafia III es un título que generó muchas expectativas y que, en gran parte gracias a sus predecesores, tenía puesta la vara muy en lo alto a la hora de esperar grandes cosas de él. Entonces ¿cumplió con este estándar tan elevado? En general podemos decir que no. Si bien supo mantener el nivel de elementos claves de la franquicia, como la historia y la banda sonora, a la vez carga en sus espaldas con un gran número de irregularidades, como la enorme cantidad de errores técnicos y lo cansadoramente repetitivas que resultan las misiones.
Para los amantes del género, Mafia III será un título aceptable con el que se pasarán una buena cantidad de horas disfrutando de eliminar a enemigos de formas muy sangrientas. Para los amantes de la saga, que esperaban grandes cosas de esta entrega, posiblemente les faltará mucho para llenar esas ilusiones con las que tanto se esperó.