Offensive Combat: Redux! es otro shooter más a la lista pero con una gran variedad de ítems personalizables.
Offensive Combat: Redux! es un reboot del juego original, Offensive Combat, un MMOFPS totalmente gratuito, desarrollado por U4ia Games, que se lanzó en junio de 2013. Ahora, la nueva versión, ofrece mejoras, nuevos modalidades de juego y mucho contenido para personalizar tu personaje y armas. Este reboot fue desarrollado por Three Gates AB y se lanzó el 18 de agosto de este año únicamente para PC.
Como ya mencionamos, Offensive Combat: Redux! es un shooter en primera persona en el que tendrás que derrotar al equipo enemigo, ya sean otros jugadores o bots, en diferentes mapas y modalidades que el juego ofrece. El objetivo de este título en sí es aniquilar a todo enemigo que se te cruce, aunque lo se destaca es el humor vulgar y la cantidad de ítems bizarros que podés usar. Lamentablemente, no tiene historia alguna. Hubiese sido una gran idea incluir una pequeña campaña, al mejor estilo Saints Row, para hacerlo más interesante y que atraiga más público. De todos modos, hubiese tomado tiempo y recursos realizarla, ya en el juego original no hubo campaña alguna.
Lo que tiene de positivo Offensive Combat: Redux! es la personalización variada que tenemos. Podemos comprar y cambiar la cabeza, brazos, piernas, cuerpo y armas de nuestro personaje totalmente con el dinero que adquirimos al jugar un par de partidas, por lo que no es ningún Pay-to-Win. Tenemos desde un soldado hasta un traje de panda, o también podemos ser Trump, Hillary o el emoji de caca. Claramente, el equipo que desarrolló este fps se tomó mucho tiempo incluyendo estos ítems variados.
Además de dicha variada selección, el juego te ofrece elegir los llamados PWNs – una forma de burlarse del oponente – o maniobras que podemos utilizar al derrotar a un enemigo. Cuando liquidamos a uno de ellos, tenemos la opción de hacer la animación que elijamos sobre él, como por ejemplo, el típico teabag del que estamos acostumbrados a hacer y que nos hagan. Otros son bailes, liberación de gases (para decirlo sutilmente), entre otros.
En cuanto a las armas, podemos seleccionar diferentes cañones, mirillas, capacidades de munición y diseños. El único momento que podemos cambiar nuestro loadout es cuando esperamos que inicie la partida, pero no entre muertes y rondas. Tampoco hay algún tipo de feedback al pegarle a un enemigo o cambio en el daño que se le hace, como así ocurre con nuestra primer arma y una más avanzada. Como cualquier otro shooter bien hecho, el movimiento del mouse es fluido, permitiéndonos apuntar bien al objetivo, pero en cuanto a saltar y correr, a veces es medio incómodo. Podemos saltar objetos enormes pero otras veces no podemos saltar las péqueñas.
Los mapas que nos ofrece Offensive Combat: Redux! podría decirse que uno está tan familiarizado con los mapas de otros shooters, que los de este juego son súper genéricos. Podemos jugar un mapa una partida, y a la siguiente ya sabemos donde se encuentra cada escondite, los sectores más usados por los campers o por los francotiradores. Sin embargo, hoy en día no es tan fácil diseñar un mapa para un shooter. En estos mapas se pueden jugar los típicos modos de juego de cualquier otro shooter: Deathmatch, Team Deathmatch, y Captura la Bandera. No ofrece ningún modo nuevo no visto anteriormente.
Teniendo en cuenta que es un shooter, nunca falta el chat plagado de insultos y acusaciones de ser un hacker por el simple hecho de tener mejores reflejos que el resto. Lo que realmente no nos gustó es que no hay forma de jugar en un mismo equipo con tus amigos. Caés donde caés y así jugás, en contra de quienes no querés, y hay que bancarse que los equipos no estén balanceados. A veces, podés estar varios minutos en el lobby esperando que inicie una partida de un modo de juego específico. La manera más fácil de empezar a jugar rápido es elijiendo jugar cualquier modo que esté para empezar ya. Esto quiere decir que hay muy pocos jugadores activos y puede ser difícil jugar una partida.
Hablemos de los gráficos y sonido. Los gráficos no son para nada deslumbrantes, más bien, pareciera un juego que salió antes del 2010. El HUD y las armas parecen estar muy cerca de la cara, un poco incómodo para jugar y estar atentos a lo que ocurre a nuestro alrededor. Y de más esta decir, las notificaciones de cuando derrotás a un enemigo son poco abrumadoras. El sonido parece aún más malo que los gráficos. Las armas, todas suenan iguales, y la intensidad con la que se escuchan los disparos, es la misma estés donde estés en el mapa. Los sonidos son muy genéricos y no ayudan mucho a la jugada. Son de baja calidad, como si fueran sacados de un título bastante viejo. Aún peor es con las pisadas, que en un shooter son esenciales para planear nuestro ataque. Como con el sonido de armas, las pisadas de los jugadores se escuchan como si estuvieran al lado tuyo no importa donde estén.
Para ser un reboot, que honestamente no era necesario, esperábamos algo más armado, más actualizado o mejorado. Es evidente que dentro de un año, o quizás menos, el juego no tendrá muchos jugadores y quizás sea muy difícil encontrar una partida en menos de diez minutos. De todas formas, dejando de lado los aspectos negativos, es un título divertido para jugar con amigos, sin importar que no caigan en el mismo equipo, podría ser un juego para pasar el rato – como Blockstorm -, burlarse de los personajes de cada uno y hacer unos lindos teabags.