Analizamos esta interesante historia de terror que se pierde en un mar de groseros bugs, errores de jugabilidad y problemas técnicos que nunca terminan.
Estamos en octubre y qué mejor forma de celebrar Halloween que con un buen videojuego de terror en tercera persona. De esa forma encaramos Remothered: Broken Porcelain, esta secuela que nos tenía con muchas ganas pero que una vez en nuestras manos ha resultado en una completa desilusión: a pesar de su comienzo prometedor, un sinfín de fallos en todos sus apartados acaban por generar una experiencia demasiado frustrante.
Hace algunas semanas Darril Arts y Stormind Games, los estudios a cargo de su desarrollo, nos avisaban que adelantarían el lanzamiento con el fin de no tener tanta competencia en las fechas de la Noche de Brujas. Sin embargo, puede que esta llegada precipitada le haya jugado en contra a este título, al cual claramente le faltan muchas horas de horno.
Los secretos de Ashmann Inn
Remothered: Broken Porcelain es una secuela de Tormented Fathers, aunque su historia claramente puede ser comprendida e incluso disfrutada por cualquiera, independientemente de si se jugó o no la primera parte. Los hechos nos llevan al hotel Ashmann Inn en donde nos toca encarnar a Jennifer, una joven que se encuentra atrapada en el lugar y deberá sobrevivir a los ataques de un poderoso grupo de cazadores con poderes sobrenaturales, mientras desentraña los oscuros secretos que se esconden en el edificio.
Préstenle mucha atención a lo que acabamos de contarle, a esa narrativa que desde el vamos resulta interesante, porque es de lo poco que podremos rescatar al final de este análisis. Durante los primeros compases del juego se nos deja en claro que estamos solos y que los peligros estarán acechando a la vuelta de cada esquina, mientras que la historia se nos sigue contando mediante cinemáticas bien elaboradas que aparecen cada tanto, con personajes bien construidos y diálogos escritos con solidez. Un combo que se disfruta pese a algunas secuencias que se cortan y otras charlas mal subtituladas.
Unos bugs de terror
El título de este apartado no es exagerado. Durante las primeras dos horas de juego ya sufrimos un total de tres bugs que nos obligaron a salir y volver a entrar, ya sea por encontrarnos con nuestra protagonista trabada en una cobertura sin poder moverse o una interacción con un objeto de la cual nunca pudimos salir. Así errores de todo tipo se han ido entrelazando en las alrededor de 8 horas que nos ha durado la aventura, pasando de groseros como los que les acabamos de contar hasta otros menores como cortes abruptos en la música o movimientos locos de los enemigos, que igualmente acaban por frustrar la experiencia.
Está claro que a Remothered: Broken Porcelain le han faltado muchas horas de horno, con problemas que también afectan al gameplay, como la imposibilidad de desbloquear ciertas habilidades o fallos con el crafteo que aún ahora se nos hacen imposibles de comprender. Realmente es muy difícil completar una secuencia en el título de Darril Arts y Stormind Games sin haber sufrido, al menos, un buen puñado de bugs que sin llegar a obligarnos a reiniciar el juego igualmente nunca nos han dejado sumergirnos en la oscura atmósfera que pretenden crear.
Escapando a tropezones
Y si los errores simplemente acabaran en cuestiones técnicas, quizás podríamos disfrutar de su jugabilidad, aunque tampoco podemos hablar muchas cosas buenas de este apartado. Remothered: Broken Porcelain es un juego de terror y supervivencia en tercera persona con los elementos clásicos del género, mezclando mayormente momentos de infiltración con algún que otro pasaje de acción. Sin embargo, la propuesta falla cuando nos ofrece un único camino a la hora de resolver las situaciones por lo que simplemente deberemos cumplir con lo que se nos ordena, capítulo tras capítulo.
Las secuencias de sigilo cumplen sin más, con todas las clásicas mecánicas como ocultarse en un armario o distraer al enemigo lanzando un objeto, pero también sufre de algunos bugs groseros como cuando los cazadores son capaces de vernos a través de los objetos en los que nos ocultamos. Las secuencias de acción, obligatorias en demasiados casos, tampoco terminan de funcionar gracias a unos enemigos torpes, que solo nos complican las cosas cuando nos golpean a distancias ilógicas y de los que casi siempre solo deberemos escapar corriendo, porque la mayoría de las armas resultan inútiles.
Por si todo esto no fuese de por sí lo suficientemente frustrante, Remothered: Broken Porcelain tiene a una Jennifer a la que claramente le cuesta demasiado moverse. No, no tiene ningún problema motriz la protagonista, sino que su desplazamiento es exageradamente tosco, sumado a una configuración de los controles que no ayuda nada y a unos escenarios que no hacen más que complicar las cosas: prácticamente todos los objetos repartidos en los diferentes lugares nos entorpecen el avance y, para colmo, muchas veces los comandos para sortearlos simplemente no responden.
Luces y sombras – Apartado técnico
Aunque con algunos fallos, lógicos de un título a medio cocer, el apartado artístico de Remothered: Broken Porcelain es de lo mejor que podemos encontrarle. A nivel gráfico está más que bien para un título independiente bastante más ambicioso de lo que cabría esperar, con unos personajes bien diseñados y unas animaciones faciales que ayudan mucho en las cinemáticas que nos cuentan un poco de su aterradora historia. Los escenarios también están bastante bien a nivel visual, con bastante cuidado por los detalles, a pesar de una iluminación que no nos ha terminado de convencer sobre todo en las zonas más oscuras del hotel.
A nivel sonoro es bastante irregular, con un trabajo de voice acting con algunas performances logradas y otras no tanto, más una banda musical que tiene unas piezas bastante intensas que sufren mucho cuando se las corta abruptamente por unos claros errores de programación. En cuanto al rendimiento no está mal, pero claro está que los bugs y problemas técnicos de todo tipo acaban por ser los elementos que predominan en una experiencia que podría haber sido mucho más agradable si hubiese sido lanzada cuando estuviese en condiciones.
Remothered: Broken Porcelain, el veredicto final
Darril Arts y Stormind Games han decidido adelantar el lanzamiento de su juego y está claro que ha sido un error, porque termina llegando al mercado en una versión que ciertamente está a medio cocer. La cantidad de problemas técnicos y bugs groseros nos impiden dejar pasar esta decisión pese a que puedan llegar a corregirse con futuros parches, porque nos han terminado por frustrar toda la experiencia.
Remothered: Broken Porcelain plantea una historia interesante con buenos personajes y un apartado artístico destacable, pero estos acaban por ser los únicos elementos positivos de un juego al que le faltan muchísimas horas de horno y con el que es difícil divertirse, debido a un enorme puñado de bugs y una jugabilidad tosca que nunca permite sumergirnos en la atmósfera de terror que intenta generar.