Una de las series románticas/slice-of-life más populares y leídas en los últimos meses. Cheese in the trap es un webtoon surcoreano nos trae una mezcla de personajes realistas, un estilo gráfico original a todo color y un argumento que toca temas de amor, dinámicas de pareja y comienzos de vida de adulto.
Si bien el manga, o cómic japonés, es el más emblemático dentro de las historietas orientales, no es para nada lo único que hay en historias gráficas por la zona. Cada país tiene su rubro de cómics originales con leves variaciones en el nombre: manga japonés, manhua chino y manhwa surcoreano (el caso de Cheese in the Trap) por nombrar solo algunos.
Este último tipo es especialmente interesante porque, si bien hay toda una industria en torno a la lectura de historietas, la mayor parte de ella es leída digitalmente en el formato de webtoon.
“Es casi lo mismo”, dirán algunos, pero la verdad que no lo es para nada. Los webtoons plantean varias diferencias con sus contrapartes de papel, empezando por que están diseñadas para ser leídos verticalmente, lo cual implica varios cambios en la puesta en página y resulta mucho más amigable para la lectura vía dispositivos móviles y el uso del scroll. Otra diferencia interesante es el uso de efectos de sonido o música ambiental que hacen algunos títulos y que se sincronizan con la lectura a medida que uno va bajando por la “página”.
Cabe aclarar que si bien estas historietas están armadas desde el vamos con formato vertical, varios sitios de lectura de mangas, etc. como es el caso de MangaFox traen en su versión móvil la posibilidad de poder scrollear verticalmente por las páginas, aunque claro que como el contenido no está pensado con ese fin no se ve del todo coherente, por más fácil de leerlo que sea.
Recientemente uno de los títulos que más suena en el ambiente webtoon es Cheese in the Trap, de la autora Soonkki. La historia se encuentra dividida en cuatro temporadas con varios episodios o capítulos cada uno, a todo color y con el ya mencionado formato vertical. Se encuentra serializado por la página web/ buscador de todo / pseudo dueño digital de Korea del Sur, Naver (que casualmente también es autor y dueño del sistema de mensajes móviles LINE, un competidor mundial de Whatsapp).
El argumento arranca con la vuelta a la facultad de Seul Hong, una estudiante que se tomó un año sabático por motivos varios, y su relación con su superior o sunbae (el equivalente al sempai japonés) Jung Yoo.
La historia de Cheese in the Trap arranca para nosotros in media res, ya que entre ambos personajes ya hay bastante interna que juega un rol importante en la forma de relacionarse actualmente. Por ejemplo, por medio de flashbacks (señalizados por un fondo negro a diferencia del fondo blanco característico) nos enteramos que Jung se la hizo bastante complicada a Seul el año anterior, teniendo bastante que ver con su decisión de tomarse un año de la facu.
Jung es un tipo bastante macanudo con todos a primera vista, pero de a poco vamos viendo que tiene una tendencia de enquilombarle la vida a quien le cae mal sin quedar pegado. Y no estamos hablando del típico bulling, sino del hecho de mandarle un acosador potencialmente violento a la casa de una mina que le cae mal. Todo eso sin quedar en evidencia. Es un tipo que se debate entre un loco de mierda y el típico amigo de todos, y se torna todavía más interesante cuando a partir de la vuelta de Hong se le pianta empezar a perseguirla e invitarla a salir.
Hong por el otro lado, a diferencia de la típica protagonista shoujo que vive en Bavia, tiene un especie de rechazo/miedo a Jung, lo cual es totalmente entendible para nosotros los lectores pero que le cuesta explicar incluso a ella misma. Si bien ella se manda cagadas como toda heroína, tiene una capacidad de reflexión, una percepción y unos diálogos internos que la destaca de las demás minitas típicas de cómics orientales y la hace bastante más relacionable. ¿A quién no le pasó de estar debatiendo temas con uno mismo? Pero a medida que avanza la historia Seul nota que se vuelve cada vez más dependiente de Jung en varios sentidos y eso le causa replantearse constantemente temas como la independencia, el orgullo y la honestidad.
Claro que como todo cómic hay una banda de personajes más aparte de estos dos, y cada uno con su historia secundaria, sus debates y problemas personales.
Otro tema para destacar es el uso del color y el estilo gráfico particular de Soonkki. Si bien Cheese in a Trap está a color, no tiene esa cosa de todo al palo, con ese horror al vacío y la sobrecarga de detalles que esperamos de sus contrapartes japoneses. Las puestas son tranquilas, colores agradablemente desaturados y es muchísimo más amigable a la vista y la lectura. Y si bien el estilo de la autora no tiene la precisión anatómica de muchos otros artistas, la expresividad y el uso del humor está bastante bien logrado.
Cheese in the Trap se publica vía Naver regularmente desde el año 2010, pero ha cobrado mayor relevancia durante las últimas semanas debido al lanzamiento de la adaptación del cómic a la novela actuada, o dorama. Si bien las novelas live action no son para todos, está bueno rescatar que el cómic definitivamente se la banca a nivel historia. ¿Tendremos una adaptación animada en algún momento? Solo el tiempo dirá.
Por Mechi Di Paola