Reseña del nuevo tomo de la Colección Astérix y Obélix: La cizaña, publicado por Editorial Salvat por Alberto Uderzo y René Goscinny.
Finalmente, luego de incontables batallas, el senado romano ha decidido cortarle los víveres al Cesar debido a sus continuos fracasos frente a la conquista de las aldeas situadas en La Galia. Al parecer, la reticencia de nuestros galos ha complicado al extremo los planes del emperador romano, por lo que éste está decidido a conquistar la aldea de una vez y para siempre.
Tras analizar junto a sus asistentes porque es que los galos siempre resultan triunfantes, el Cesar llega a la conclusión de que hay dos motivos principales por los que siempre son derrotados. Primero, la famosa poción mágica que prepara el Druida Panorámix, luego, la unión y hermandad que existe entre ellos, por lo que el nuevo plan de Roma consiste en dividir a la aldea.
Para separar a Astérix y los demás, los romanos deciden enviar a Perfectus Detritus, quien es conocido por sembrar cizaña entre un grupo de personas a instalarse en La Galia y romper el vínculo que vuelve tan poderoso a los galos.
Al llegar a la aldea, el romano decide regalar un precioso jarrón al “hombre más importante del pueblecito galo“, quien resulta ser Astérix. Esto obviamente genera incomodidad a todos de los habitantes, ya que han comenzado a sospechar sobre Astérix y su amistad con el romano, al punto de creer que les ha revelado el secreto de la pócima mágica.
Una vez que los romanos se enteran de lo que está sucediendo en la el pequeño poblado de Armónica, Detritus procede a hacerles creer a Astérix y compañía que los romanos ahora poseen la fórmula que los hará más fuertes que nunca dándoles agua hervida a las legiones del César. Al enterarse de esto, y sabiendo que es mentira, Astérix y Panorámix deciden darles una lección, dejando el pueblo junto a Obélix e Idéfix. Al llegar al campamento, les cuentan a los romanos que debido a la llegada de Detritus, no hay más armonía en la aldea y como el Druida está con ellos tampoco tienen poción mágica, por lo que las legiones deciden atacar el poblado, creyendo además que ellos sí tienen superfuerza.
Cuando abandonan el territorio romano, los héroes toman consigo la marmita con poción falsa y llevándola al pueblo para que comprueben que en verdad los romanos no tienen la fórmula y que todo era una mentira. De esta forma, Panoramix se pone a realizar más brebaje y así logran, una vez más, derrotar a las tropas del emperador culminando todo con el tradicional banquete.