Reseña un nuevo tomo de la Colección Astérix y Obélix: La odisea de Astérix, publicado en Editorial Salvat por Alberto Uderzo y René Goscinny.
Cuándo uno de los vitales ingredientes de la pócima mágica de Panoramix está en falta, son nuestros héroes, Astérix y Obélix, los que deberán hacerse a una nueva aventura con el fin de conseguir el importante insumo que el druida de la aldea está necesitando.
La aventura comienza presentándonos a Julio César enardecido porque gracias a la poción mágica, sus tropas siempre son derrotadas por los galos de Armónica por lo que el Jefe de la Policía Secreta, Fielhastalfinus, le cuenta su plan para robar la receta de la poción mágica: enviar al druida-espía, Ceroceroséix para que Panoramix le transmita el secreto dado que solo puede pasarse de druida a druida.
Mientras esto sucede en Roma, en La Galia Panoramix está preocupado por la escasez del Aceite de Roca, un material de vital importancia en la elaboración de su brebaje, y lo peor es que cuando el mercader se acerca a la aldea y le cuenta al druida que no hay nada disponible, a éste le da un síncope quedando desmayado y teniendo que nuestros héroes salir a buscar a alguien que lo asista, encontrándose en ese momento con Ceroceroséix, quién gracias a sus conocimientos logra recuperar la salud de nuestro barbudo y canoso amigo.
Una vez que las cosas se acomodan en la aldea, el Druida decide enviar a Astérix y Obélix a Mesopotamia, de dónde se obtiene el aceite de roca, por lo que automáticamente Ceroceroséix decide acompañarlos con el objetivo de que no puedan conseguir lo que necesitan. A lo largo del viaje, el espía romano va enviando a través de una mosca información a las legiones sobre los movimientos de los galos, por lo que las legiones se adelantan y logran destruir todo el cargamento que había en la zona, por lo que al llegar con el mercader, nuestros héroes siguen con las manos vacías.
Cuando nuestros protagonistas comenzaban su periplo ahora hacia Babilonia, lugar dónde el aceite brota de la tierra, encuentran en un desierto un yacimiento, por lo que pueden abastecerse y comenzar su retorno. Es aquí cuando Ceroceroséix y Fielhastalfinus, los romanos que buscaban desbaratar la operación, vuelven a la escena provocando que se derrame todo el contenido. A pesar de regresar sin nada, se topan con una gran sorpresa ya que Panoramix ha encontrado un sustituto natural al aceite: jugo de remolacha, por lo que para celebrar que todo sigue igual de bien, deciden realizar un gran banquete en honor a nuestros héroes.