Review del octavo número de la Colección de Salvat DC Comics – Batman: Batman e Hijo.
El nuevo número de la colección trae el comienzo de una maravillosa etapa en las páginas de Batman y es el regreso de Grant Morrison a Gotham City. El autor escocés del anual de “Batman” de 1986, la galardonada “Arkham Asylum” y el arco Gothic de “Legends of the Dark Knight“, retomó su rol de conductor y encaró una satisfactoria etapa que abarcó desde el 2006 hasta el 2013.
Para hacer un lavado de cara al mundo Batman, Morrison optó por traer al juego una vieja historia de 1987 conocida como Batman: Son of the Demon en la cual Talia Al Ghul, hija de la cabeza de demonio, estaba embarazada de Bruce Wayne pero supuestamente lo había perdido.
Batman e Hijo introduce a la escena al cuarto Robin, Damian Wayne, una pequeña máquina de cercenar cabezas, pelear e insultar que fue criado y entrenado por La Liga de Asesinos que el mismísimo Ra’s Al Ghul comandaba para convertirse, eventualmente en el sucesor de su abuelo.
La historia, como todas las escritas por Morrison, cuenta con una narrativa impresionante y que nos lleva a pensar distintas teorías que, a medida vamos avanzando, quedan descartadas. Es muy característico de este autor querer hacernos pensar y analizar para terminar dando una vuelta de tuerca, como con la primera escena del Joker.
En cuanto a lo que los lápices tiene que ver, esta aventura presenta al grandioso Andy Kubert, un autor que destaca por su trazo realista y detallado en el que la disposición de colores y viñetas nos permiten ver por qué los cómics son más que una superposición de imágenes, son un arte.
Este número, compuesto por siete issues trae lo que es propiamente la introducción de Damian Wayne y además otros tres conocidos como: “Tres fantasmas de Batman”, “Los archivos negros” y “Batman en Belén”.
La aventura cuenta con varios puntos altos a lo largo de su narrativa, como es la revelación de la paternidad de Bruce Wayne, el primer encuentro entre Damian y Tim Drake, el tercer Robin e hijo adoptivo de Batman, los Manbat Ninjas entrenados por la Liga de Asesinos (no es un chiste, son mutantes murciélagos con katanas) y el final de la novela, con el proceder de Talia para con su hijo.
Probablemente, muchos relacionan este título de la colección con la película animada estrenada en el año 2014 de la cual lo único que realmente podemos apreciar que se toma es a Damian y los Manbat. Hay una vasta cantidad de diferencias entre el filme y el cómic, empezando porque la cinta animada sustituye a Tim Drake por Dick Grayson, Talia no es mala, y muestran la muerte de Ra’s en manos de Deathstroke, algo que no está en las páginas de Morrison y Kubert.
El próximo número de la Colección Salvat de Novelas de DC será “Harley Quinn: preludio y chistes malos“, el debut de un personaje sacado de la serie animada que, debido a su éxito, fue una adición obligada a las aventuras de Batman.