El mundo festeja Halloween y por nuestra parte conmemoramos la fecha con una lista de los que nosotros consideramos enormes títulos para provocar piel de gallina. Y no es una tarea para nada fácil, la industria nos ha regalado una gran cantidad de obras que nos han puesto a gritar, pero con total subjetividad admitida, este es nuestro top 10 de los mejores juegos de terror.
Número 10. Project Zero 3, The Tormented (Fatal Frame III The Tormented): Imaginensé un juego de horror en el cual el único arma es una cámara fotográfica; Bueno de eso se trata esta saga, quitarles el poder a los espíritus a puro flash es lo que convierte a este título en una experiencia totalmente desesperante. En este caso, la tercera entrega, junta las dos anteriores, con sus personajes y mundos, para hacernos temblar sin parar.
Número 9. Slender , The Eight Pages: Los gráficos no importan, ni tampoco la calidad del sonido. Este videojuego, basado en la historia del gigante ser sin rostro que secuestra niños, provoca situaciones de pánico total mientras intentamos encontrar las diferentes notas con tan solo una linterna en un bosque oscuro.
Número 8. Amnesia, The Dark Descent: Encarnamos a Daniel, un personaje que despierta sin recordar nada gracias a que Alexander le provocó amnesia. ¿Qué deberemos hacer? Buscarlo y vengarnos; Claro, deberemos hacerlo sin armas, a puro ingenio sorteando situaciones verdaderamente tenebrosas.
Número 7. Dead Space 2: La segunda entrega de Visceral Games que vuelve a sumergirnos en una estación espacial desolada. Una vez más en la piel de Isaac Clarke deberemos recorrer los oscuros pasillos enfrentándonos a las criaturas deformes llamadas necromorfos. El sonido, los gráficos y la ambientación vuelven para provocarnos los más profundos escalofríos.
Número 6. The Evil Within: Gritos, sangre, muerte y asesinatos. Todo esto en el marco de un hospital, sí, al mejor estilo película de terror. Como un agente policial deberemos resolver el caso sobre lo que parece una masacre. Una experiencia que no podes perderte ¿o si?.
Número 5. Resident Evil 3, Némesis: Protagonizada por Jill Valentine la historia transcurre antes y después de la segunda entrega de la saga. Los zombis no son novedad, pero el condimento especial y más terrorífico del juego yace en las apariciones de Nemesis, esas persecuciones que jamás olvidaremos y que de vez en cuando se hacen presentes en forma de pesadillas.
Número 4. Silent Hill: Una locura. Un lugar que esconde un escalofriante secreto. En un mundo que se codea con el infierno deberemos abrirnos paso para encontrar y rescatar a nuestra hija de las manos de un poder demoniaco. Una obra que se mete en tu cerebro y toca las más profundas fibras.
Número 3. F.E.A.R: En este título, en el que su nombre habla por sí solo, sí podrás abrirte paso a tiros. Sin embargo, las balas no te serán útiles siempre. El aspecto más perverso del juego se encuentra en esos momentos en los que más tranquilo te sentís, cuando crees que estás a salvo, en realidad, solo tenés que prepararte; cuidado atrás tuyo.
Número 2. P.T. Silent Hills: Solo fue un teaser jugable, es verdad, pero eso no le quita ganarse por completo el segundo puesto de este top. Dos pasillos, una escalera y una puerta bastan para crear un espacio terrorífico. En ningún momento te vas a sentir seguro y creelo, hasta los vecinos van a escuchar tus gritos. Lamentamos que no haya llegado a más, pero bastó con esa pequeña muestra para hacernos mal al corazón.
Número 1. Resident Evil 2: Un ícono. Survival horror de pies a cabeza. La historia transcurre dos meses después de lo acontecido en la entrega original y tiene como protagonistas a Leon Kennedy y Claire Redfield. Sin los gráficos de hoy en día este videojuego de zombis nos puso los pelos de punta durante horas hace ya muchos años y, no por nada, volverá a hacerlo pronto, con ansias (y con un poquito de miedo) lo esperamos.
Así concluye nuestro ranking, para muchos habrán quedado juegos afuera y los invitamos a que nos lo comenten. Les deseamos un feliz Halloween y tengan cuidado cuando se vayan a dormir.
