Concrete Genie nos invita a embarcarnos en una mágica y colorida aventura para salvar a Denska, una pequeña ciudad que se encuentra sumergida en la oscuridad.
Pixelopus es una pequeña desarrolladora que forma parte de las diferentes divisiones que maneja Sony Interactive Entertainment. Desde su creación en 2014 solo habían lanzado Entwined, un pequeño título que mezclaba música con plataformas y destreza, y a pesar de su simpleza dejó a relucir el potencial que poseen sus creadores.
Ahora, con Concrete Genie (juego anunciado en 2017), han intentado ir un paso más allá, utilizando el arte y el dibujo como piezas fundamentales en una aventura híbrida compuesta por puzzles y dosis plataformeras, con un llamativo diseño artístico y una historia simple pero con un lindo desarrollo, tan llevadero como emocional.
Concrete Genie, además de tener compatibilidad con PS VR, nos permitirá transformar el joystick en un mismísimo pincel, utilizando los sensores para trazar las diferentes figuras y realizar hermosas creaciones, que cobrarán vida para salvar a la ciudad que vivimos de una profunda oscuridad.
Este nuevo exclusivo de PlayStation 4 y PS VR no llegará en formato físico en Argentina, pero se puede adquirir a través de PlayStation Network de manera digital.
Salvando a Denska de la oscuridad reinante
Concrete Genie nos pone en la piel de Ash, un adolescente que vive en la casi inhabitada Denska, una ciudad pesquera que no está atravesando su mejor momento, no solo por una inestabilidad económica palpable en sus locaciones sino por una “oscuridad” que se apoderó de la región, haciendo que gran parte de su población la abandoné.
El protagonista es un fiel reflejo de lo que padecen muchos chicos de su edad: personas que sufren del constante bullying de grupos de jóvenes que no tienen la mejor idea que molestar al diferente, al distinto o al “bicho raro”. La pasión que tiene Ash por el arte no tardará en despertar la magia que reside en el juego, ya que se hace poseedor de un pincel mágico que no solo es capaz de combatir esa oscuridad que reina en cada manzana de Denska, sino que sus dibujos cobran vida ofreciendo la posibilidad de crear diversas entidades, bautizadas como genios, que lo ayudarán a salvar la ciudad.
Su interacción con un grupo de chicos que lo agreden no solo verbal sino físicamente genera que su cuaderno de bocetos e ilustraciones se rompa y sus hojas queden desperdigadas por todo esta ciudad.
Bajo esta premisa, tendremos que ir recorriendo diferentes zonas de Denska con el fin de ir erradicando la oscuridad que está arraigada con fuerza en la región mediante la ayuda de las diferentes criaturas que vamos creando y al mismo tiempo ir recuperando las hojas perdidas de nuestro cuaderno. A base de bocetos, pinceladas e ingenio iremos abriéndonos paso, en donde además descubriremos el origen de la oscuridad y por qué la ciudad se desmoronó.
El argumento va más allá de una simple lucha entre bien contra el mal y esa dicotomía entre la luz y la oscuridad; Concrete Genie busca con un pretexto poético tocar temas más profundos, no solo la soledad Ash y su “imaginación” artística para crear esos nuevos amigos que no consigue en su vida cotidiana, sino también intenta poner en perspectiva la postura del bullying y el accionar de los chicos que molestan al protagonistas. ¿Por qué son así?, ¿cuál es la razón por la que tienen tanta violencia contenida? La magia que está tanto dentro de Ash como en el pincel serán claves para desentrañar estas preguntas.
Concrete Genie es un juego relativamente corto, en unas 5 o 6 horas podremos superar la historia, pero que busca no dar vueltas en lo que propone. La historia va en sendas paralelas para contar su argumento y al mismo tiempo poetizar con metáforas y sentimientos. Es un juego con un corazón enorme y es en la sencillez de sus mecánicas y el diseño artístico de sus personajes donde crece esa magia que destila en cada una de sus pinceladas.
Un poco de puzzles, un poco de plataformas
Concrete Genie arma dentro de sus mecánicas una fusión de conceptos plataformeros con puzzles, todo ambientado en un entorno de semi mundo abierto donde se nos permitirá conocer las diferentes regiones de Denska a medida que vayamos progresando en el juego. Son 4 zonas que se irán habilitando una a una, en las que el objetivo siempre es el mismo: utilizar nuestro pincel para ir haciendo dibujos en la pared y prender diferentes bombillas que van iluminando el recorrido, combatiendo la oscuridad limpiando las zonas de todo tipo de peligros.
En nuestro periplo por encender estar bombillas, necesitaremos de la ayuda de los genios que iremos invocando con nuestros dibujos para afrontar los diferentes puzzles, que si bien no cuentan con un elevado grado de dificultad intenta romper con esa monotonía jugable que se palpa en sus mecánicas. Los genios tienen propiedades elementales (fuego, viento, electricidad y hielo) y la utilización de ellos será fundamental para poder avanzar. Por ejemplo, los genios de fuego incendiarán telas o lonas que cubren puertas u objetos, que habilitan la resolución del puzzle o nos permiten avanzar por la zona; o los genios de poderes eléctricos activarán determinadas cajas de fusibles activar mecanismos.
Mientras exploramos tendremos que tener en cuenta que seremos hostigados y perseguidos por este grupo de matones que no tienen mejor idea que molestar a Ash. Concrete Genie no tiene un game over explicito sino que cada vez que somos descubiertos o, por ejemplo, nos caemos de un lugar muy elevado, volvemos a comenzar inmediatamente para continuar con nuestra aventura. Con esto quiero decir que Pixelopus no hace énfasis en la rigurosidad de los desafíos sino a disfrutar del recorrido, embelesarse de ese arte callejero que creamos en cada rincón y entablar esa conexión tanto con el protagonista como con los genios.
Estas entidades que nacen de nuestra mano solo podrán desplazarse por las paredes, por lo que es obligatorio ir barriendo la oscuridad para que estos puedan avanzar y darnos una mano. De vez en cuando los genios nos pedirán algún dibujo en particular; ese será el momento para ir revisando las diferentes paginas del libro que vamos recuperando con estilos y bocetos para ir formando diferentes formas abstractas pero llena de vidas.
¿Hay lugar para la acción? Desde luego, Concrete Genie trata de mutar constantemente, como si fuera redefiniendo sus estilos con el progreso de la historia, y sin entrar en spoilers, el juego nos invitará de una forma más sutil tener enfrentamientos directos con esta oscuridad que intentará defenderse ante la intención de salvar Denska.
La respuesta de control como extensión de nuestro cuerpo ejerciendo el rol de pincel funciona correctamente, y si bien algunos desafíos no requieren de un pulso exacto para establecer las pinturas que son requeridas, la curva de aprendizaje es sumamente baja y en pocos minutos nos sentiremos un artista contemporáneo creando diferentes obras de arte. Concrete Genie también cuenta con un apartado para PS VR que no solo permite una inmersión mayor dentro de la aventura, sino que además cuenta con su propio modo de juego, que expande la vida útil de esta IP. También cuenta desde su lanzamiento con un Modo Foto, que permite congelar en todo momento el juego para inmortalizar como queramos nuestra aventura con Ash y los Genios.
Una obra de arte en movimiento
Concrete Genie puede ser una conjunción de estilos o una hermosa historia que toca diferentes aristas emocionales, pero lo que es un lujo palpable es su potencia visual que se desarrolla y muta constantemente.
El estilo callejero para irrumpir en los escenarios como esa fuerza contra la oscuridad es un elemento muy valioso dentro del juego, que se mezcla con una animación en stop-motion fundiendo 2 estilos bien diferenciados, que logran convivir de manera una y el poder artístico toma las riendas de un título que podría haber caído en la bolsa de las propuestas genéricas pero Pixelopus logra todo lo contrario.
La paleta de colores que nos permite utilizar es una contrapuesta ideal para esa oscuridad que reina en Denska y la posibilidad de crear a los genios con una variada casi ilimitada de formas hace que, dentro de las opciones que permite el juego, creemos una obra única.
De yapa, el título viene con un más que correcto doblaje al español latinoamericano, para que podamos prescindir de los subtítulos y sumar un escalón más a la inmersión.
Conclusión
Plataformas, puzzles, sigilo y acción. Todo eso podremos encontrar en Concrete Genie, un título que no busca destacarse por sus mecánicas más convencionales sino que apunta a una vertiente más artística y emocional. El viaje de Ash toca varios temas muy interesantes, algunos que intentan buscar una segunda mirada o una perspectiva diferente y si bien su historia principal sea un tanto corta, el título de Pixelopus cuenta con varios coleccionables para conseguir el 100% luego de finalizar, además de un modo de pintura libre para poder exprimir todos nuestro talento y crear suculentas y coloridas obras de arte.