Nintendo sigue siendo el líder indiscutible de los party games y, con aciertos y errores, “Everybody 1-2-Switch!” es un pleno para esas reuniones con amigos.
Haciendo muy poco ruido, Nintendo regresó al mercado de los party games. Mientras esperamos el lanzamiento del indiscutible rey de este género, “WarioWare: Move it!“, “Everybody 1-2-Switch!” es una opción más que entretenida para ir calentando motores. Con muchos aciertos y algunas pequeñas fallas, nos encontramos ante una propuesta multitudinaria como pocas veces se ha visto y con una facilidad de acceso extraña para lo que suelen ser los estándares de la compañía nipona.
Aquellos que tengan una Switch y quieran jugar con sus amigos a algún party game estarán familiarizados con la frase “che, ¿te copás con algunos joycon?“, y es que Nintendo tiene una amplia variedad de estos juegos en su catálogo, pero todos requieren del uso de varios controles para que varias personas puedan jugar. Bueno, no todos exactamente. “Everybody 1-2-Switch!” no solo ofrece la posibilidad de jugar usando los controles nativos de la consola, sino que se deshace por completo de este factor al permitir usar los smartphones como si fueran los joysticks, permitiendo así competir con hasta ¡100 personas a la vez!
Una propuesta inclusiva
Ya sea una reunión con amigos, una actividad de team-building (esas que aman las empresas modernas) o una reunión familiar, “Everybody 1-2-Switch!” es un juego que se adapta a todas estas situaciones.
Lo que más destaca de este nuevo party game es la innovadora posibilidad de jugar con los teléfonos. Claro, ya hemos visto varios juegos que ofrecen companion apps en los últimos años, pero ofrecer un multijugador masivo utilizando un dispositivo que casi todos tenemos en el bolsillo, de manera similar a como usaríamos los joycons, es algo no solo increíble, sino además necesario.
El juego, que simula ser un concurso televisivo al mejor estilo de “Jeopardy” o, en términos locales, algo conducido por Darío Barassi, divide a los jugadores en dos equipos que compiten en varias disciplinas para poder llevarse el premio mayor… bueno, en realidad, el premio mayor es poder gastar al equipo perdedor, pero sigue siendo un planazo.
“Everybody 1-2-Switch!” ofrece varios minijuegos, aunque no son suficientes. Comencemos con lo positivo: dentro de los desafíos que ofrece este título, hay algunos muy bien logrados. Un duelo samurái en el que gana quien desenvaina más rápido al mejor estilo Rurouni Kenshin, un desafío culinario en el que debemos seguir la receta con una precisión casi quirúrgica y mover nuestro teléfono/control en el segundo exacto o un juego de escondidas en el que debemos ocultar los controles mientras el otro equipo los busca haciéndolos vibrar, son algunos de los mejores challenges que ofrece el título y de los que más risas nos sacarán.
Sin embargo, uno de los minijuegos más entretenidos resulta ser la tradicional trivia. Además de tener preguntas interesantes y de premiar no solo las respuestas correctas, sino también la velocidad de respuesta, existe una función que te permite crear tus propias preguntas, lo cual puede ofrecer un desafío altamente personalizado para el grupo, lo que se traduce en muchas risas y buenos momentos… y tal vez alguna que otra puteada.
Pero, como mencionamos anteriormente, el juego sufre de uno de los problemas más comunes en este tipo de lanzamientos de Nintendo. Al igual que ocurrió con “Nintendo Switch Sports” o incluso con “Mario Strikers: Battle League“, el juego parece ser una demo larga más que un juego completo. Hay una marcada falta de contenido, como si el plan fuese lanzar actualizaciones progresivas agregando desafíos y que lo que tenemos ahora es solo para ir chusmeando de que va a ir el juego. Claro, esto puede ser interesante para prolongar la vida útil del título a través del tiempo, pero si, en lugar de ofrecer un nuevo desafío al completar uno, la propuesta es repetir el mismo desafío con condiciones un poco más exigentes… la magia se apaga un poco.
Volviendo a los plenos que acierta Nintendo, tenemos la posibilidad de personalizar la duración de las partidas. Hay tres escalas de duración: 20 minutos, 40 minutos y 1 hora. Esto no implica juegos más largos ni nada similar, sino que aumenta la cantidad de desafíos necesarios para ganar el partido. Además, hay una especie de comodín disponible (podemos elegir jugar con él o no antes de comenzar), con la que, si la partida está muy desequilibrada, por ejemplo, si un equipo gana 4 a 0, esta carta te permite sumar puntos o quitarle puntos al otro equipo a través de un juego de azar, lo que siempre deja la puerta abierta a una remontada.
Por último, es sorprendente lo bien que funcionan los teléfonos como controles. Desde el principio, la configuración es muy sencilla: escanear el código QR de la TV e ingresar nuestro nombre. Además, el juego utiliza la función de giroscopio de los móviles con una precisión impresionante, lo que abre la puerta a infinitas posibilidades para el futuro. ¿Estamos tal vez ante una nueva forma de crear party games? Porque, sinceramente, Nintendo parece haber descifrado el código enigma con esto.
Colores y un toque de cháchara
Si algo se destaca, además de la divertida propuesta que ofrece “Everybody 1-2-Switch!“, es la interfaz con la que llevamos a cabo cada juego. Con animaciones llenas de colores y un diseño realmente propio de un programa televisivo, la propuesta nos arranca muchas sonrisas a medida que avanzamos. Tenemos, por ejemplo, un host que no podemos evitar vincular con Bojack Horseman, pero un tanto más efusivo… un tanto bastante más efusivo.
Por el lado de los desafíos, estos siempre están acompañados de un tutorial narrado que comunica con total claridad la tarea. La única “falla” en este concepto es que dicha guía no puede omitirse, por lo que corremos el riesgo de ver las mismas instrucciones varias veces, algo que puede volverse bastante molesto y repetitivo si jugamos varias partidas.
Conclusión
“Everybody 1-2-Switch!“, ¡el juego del que nada se esperaba, bastante ha hecho! llegó como sorpresa y con un perfil bajísimo logró llamar la atención en base a desafíos más que entretenidos. Si bien no es perfecto, y definitivamente podría tener más contenido del que ofrece, lo cierto es que es una propuesta fantástica para disfrutar con amigos, colegas o familia.
La inclusión de los teléfonos en reemplazo de los controles lo hace tal vez el party game más accesible de todos lo que se han lanzado en la historia de Nintendo, y por qué no, del gaming en general. Ojalá que con el paso del tiempo lleguen nuevo desafíos y minijuegos porque es un título que tranquilamente podría volverse recurrente en las juntadas con amigos, así que alguna vez supo serlo el Wii Sports, estamos tal vez ante un nuevo juego generacional.
Everybody 1-2-Switch! es definitivamente una sorpresa agradable. Un party game innovador que ofrece la posibilidad de jugar con hasta 100 personas en co-op local usando los teléfonos como si fueran joycons.
Presentando varios desafíos más que entretenidos para pasar un buen momento con amigos, falla en la variedad de minijuegos que ofrece, algo que parece ser un pecado recurrente en este tipo de juegos dentro de Nintendo.