The Bearded Ladies vuelve a pisar fuerte en el mundo de la estrategia por turnos y Miasma Chronicles es una apuesta exigente pero muy satisfactoria dentro del género.
Una de las cosas lindas dentro del amplio universo de los videojuegos es cómo cada desarrolladora intenta tener una identidad definida y sobre eso construir un adn que, título a título, vaya agregando nuevos elementos
En 2018 la empresa sueca The Bearded Ladies lanzó Mutant Year Zero: Road to Eden, una aventura de estrategia por turnos y sígilo ambientada en un mundo post-apocalíptico protagonizado por unas personajes antropromórficas que emprendían una epopeya en búsqueda de su identidad, y al mismo tiempo, una tierra prometida lejos del caos y la destrucción.
Mutant Year Zero tomó como referencia a X-Com, probablemente una de las propuesta que redefinió este género, pero que se apoyó en esa estructura para tener esos rasgos de identidad que rápidamente se pueden identificar. En este caso, la ambientación, el encanto de los personajes, un sígilo más definido y una libertad más amplia para que el jugador decida cómo encarar cada uno de los combates. Con todo esto en cuenta, llega Miasma Chronicles, una aventura que aprende de los errores de Mutant Year Zero pero que ambiciona lo justo y necesario para ser una propuesta más robusta y que se sienta en la conversación para pelear un lugar como un gran exponente para los juegos de estrategia.
Miasma Chronicles está disponible para PlayStation 5, Xbox Series X|S y PC.
Un mundo sumido en la anarquía, la guerra y la Miasma.
Al igual que en su propuesta anterior, The Bearded Ladies quiere la atención del jugador desde el primer momento y sienta las bases de su universo con la claridad suficiente como para dejar ese margen de curiosidad un paso por delante. Miasma Chronicles nos lleva una vez más a un futuro distópico en el que la civilización moderna como la conocemos sucumbió ante la aparición de la Miasma, una materia indescriptible que destruye todo a su paso, dejando a la humanidad diezmada, y conviviendo entre criaturas mutantes y robots por igual.
En este contexto, encarnamos a Elvis, un joven mecánico que tiene en su poder un guante. entregado por su madre, que tiene la capacidad de controlar la Miasma. Este poder para él tiene una sola misión: encontrar a su mamá que se encuentra detrás de un gigante muro de Miasma, que separa a la pequeña ciudad minera en la que vive del resto del mundo.
Elvis está acompañado de Diggs, un robot al cual llama hermano, y pronto se le sumará Jade, una suerte de mercenaria que no revelará sus verdaderas intenciones hasta más avanzada la aventura. A diferencia de Mutant Year Zero, Miasma Chronicles apuesta por un mundo semi abierto dividido por secciones, en donde encontraremos personajes para interactuar, ciudades para comerciar y encontrar sidequest, y amplios terrenos para explorar y dar lugar a las batallas.
Uno de los puntos más atractivos en su ambientación; un híbrido entre los restos de la civilización moderna, la adaptación de los seres que actualmente la habitan y la naturaleza abriéndose paso. Así, transitamos entre ciudades, pantanos, rutas plagadas de autos, desiertos, bosques, cuevas y hasta incluso un aeropuerto abandonado. Los amplios terrenos y la curiosidad con la que vamos conociendo cada parte de este inhóspito mundo es una invitación constante a explorar cada rincón, en búsqueda de recursos, objetos, armas, y por qué no, algunos desafíos opcionales dentro de la aventura.
El atractivo narrativo de la historia radica en cómo Miasma Chronicles toma un hecho personal, la búsqueda de nuestra madre, para luego patear al tablero y tomar una relevancia más abarcativa; donde aprovechamos para conocer los orígenes de la Miasma, pero por sobre todas las cosas conocer las dos grandes facciones que lucharon durante una extensa guerra que se llevó durante años entre “La Primera Familia”, los aristócratas y gente con poder que buscó controlar todo y los Editores, que podían controlar la Miasma y encontraban una solución pacífica para salvar lo que quedaba de la civilización.
El lore del juego se complementa mucho con estos textos que encontramos y también con diferentes robots que tiran información sobre cómo era la civilización antes de la llegada de la Miasma. Acá funciona muy bien el recurso de que Elvis, el protagonista, tiene en muchos casos el mismo nivel de conocimiento que nosotros, lo que ponernos a su misma altura es algo que motiva a querer conocer un poquito más.
En toda esa atractiva construcción argumental, la historia falla en mostrar bastante rápida alguna de las cartas más fuertes de su guión, y no logra sostener ese mismo impacto durante las casi más de 20 horas que dura su campaña principal. Eso sí, su final termina repuntando por todo lo alto y cierra una narrativa que mantiene ese efecto de empatía por lo bien construído que está el tridente protagónico, al que también se le sumás dos personajes jugables más en diferentes puntos del juego.
Durante la exploración de esta distópica región de los Estados Unidos también hay lugar para librar numerosas batallas contra criaturas, mercenarios humanos y robots. La libertad de movimiento se reemplaza por el combate por turnos, transformando el escenario en una zona cuadriculada para utilizar la estrategia que mejor se adapte al combate. Al igual que en Mutant Year Zero, podremos utilizar el sígilo para sorprender a los enemigos, aprovechar la altitud para posicionarnos mejor o aparecer por la retaguardia y utilizar el factor sorpresa.
El sigilo toma un factor relevante dentro de la ecuación, ya que si tenemos equipadas armas con silenciador y queremos atacar un enemigo alejado o que no está dentro de la visión de sus compañeros, lo podemos despachar en un mismo turno y no alertar al resto. Este trabajo minucioso inclina la balanza a nuestro favor en situaciones donde estamos superados ámpliamente en número contra rivales; y también por el hecho que Miasma Chronicles es un juego exigente: su curva de dificultad arranca bastante elevada porque nos sometemos a las reglas de este mundo, en la que los recursos son escasos y no será fácil comprar / encontrar items y equipamientos.
Durante nuestro turno, cada personaje que controlamos cuenta con dos Puntos de Acción para ejecutar comandos, entendiendo que algunos consumen un solo punto (movernos, recargar nuestras armas) y otros dos, como disparar o ejecutar las habilidades especiales. Algunos personajes, como Elvis, tienen además de la barra de vida una de energía, que permite utilizar las habilidades propias de la Miasma, técnicas poderosas que encontraremos a lo largo del juego y que complementan el uso de las armas de fuego. Así, podremos liberar grandes descargas de energías, invocar aliados o controlar la mente de enemigos.
Por úlitmo, Miasma Chronicles también hace un uso inteligente de los elementos (fuego, ácido, electricidad, aturdimiento) y que se combinan muy bien contra los diferentes enemigos que enfrentamos, cada uno con sus propias fortalezas/debilidades. Por mencionar un ejemplo, los robots que enfrentamos serán inmunes al fuego, pero si les disparamos con alguna habilidad de ácido o arrojamos una granada de este elemento, lo debilitaremos.
Cada personaje tiene su propio árbol de habilidades y puede equipar hasta dos armas. En este mundo apocalíptico, podremos armarnos con escopetas, fusiles, rifles y algunas armas especiales que tienen como función rebotar sus municiones por las paredes.
Toda esa dificultad que tiene Miasma Chronicles se aplaca en gran parte si nos tomamos el tiempo para explorar su mundo y completar las diferentes misiones secundarias que hay por diferentes puntos. Acá no hay mucha originalidad y todo se resume en eliminar un determinado grupo de enemigos, encontrar ciertos items o desbloquear alguna puerta, caja fuerte o zona con algún código. Los tableros numéricos son una constante dentro del juego e invitan con frecuencia a leer con atención los archivos que encontramos.
Si bien podemos equipar cualquier arma a los 5 personajes jugables, cada uno de ellos cuenta con sus propias habilidades que le dan cierta individualidad o estilo. Por ejemplo, el robot Diggs termina siendo el más “tanque” de todos, pudiendo cubrir grandes espacios de terreno y al mismo tiempo utilizar habilidades que desestabilizan a los enemigos. Jade combina la precisión de sus ataques críticos y los elementos, para atacar a distancia. Esta diversidad de estilos también ofrece una libertad total para emplear los combates de la forma que más sea adecue a las posibilidad que tenemos. Incluso podemos ir controlando de forma individual (punto importante, solo podemos controlar a 3 personajes en simultáneo) cada héroe y de esta forma colocarlos en posiciones resguardadas y aprovechando las vulnerabilidades de los adversarios.
Miasma Chronicles es un juego que solo está disponible para la actual generación de consolas y PC; y se refleja en diferentes puntos. Por un lado su rendimiento y estabilidad. Tenemos carta libre para utilizar viajes rápidos entre las zonas nuevas que desbloqueamos y podemos transitar entre ellas con poquísimos tiempos de carga. Sin ser una locura, la ambientación de su mundo es muy atractiva, algo que se apoya en demasía con el nivel de detalle de sus escenarios pero también la versatilidad de los mismos. Pasaremos de combatir en un boliche para robots hasta un cementerio desértico; y cada locación se siente única y “fresca” a nivel visual.
El emplazamiento de las ciudades y las zonas con habitantes también están muy bien logradas. ¿En dónde falla? Es el diseño de los personajes, en especial de los enemigos, que se ven completamente genéricos, contrastando el esfuerzo que pusieron para construir este mundo. Incluso los protagonistas no son todo lo carismáticos que si lo eran los héroes de Mutan Year Zero (aunque, en su defensa, su anterior juego dejó la vara muy alta).
Conclusión
Exigente, atractivo y adictivo. Miasma Chronicles es uno de los grandes tapados de 2023 que logra combinar muchos elementos conocidos para transformarse en un juego de estrategia fino, calibrado y exigente. La dificultad es una de las cartas de presentación durante las primeras horas de la aventura, dejando en claro que esta epopeya en la que se embarcaran Elvis, Diggs y el resto de sus compañeros será abrumadora, en la que mover las fichas sin pensar es una invitación a repetir cada batalla decenas de veces.
The Bearded Ladies marcó una clara evolución entre Mutant Year Zero y esta entrega, con una mayor ambición en la exploración, donde logra combinar una historia (que creeemos que esta un escalón por debajo de MYZ) e interesantes recursos para el combate. Lo divertido que es cada enfrentamiento tapa un poco esos detalles de diseño o falta de diversidad en sus enemigos.
Miasma Chronicles es un hermoso exponente dentro de los juegos de estrategia, pero no es ni de cerca una invitación para gente ajena al género.