Una mudanza nunca fue tan divertida. Moving Out es una propuesta cooperativa que respira una esencia Overcooked por todos sus rincones.
Todos los que atravesamos alguna vez una mudanza en nuestra vidas conocemos perfectamente ese nivel de tensión y stress que se llegan manejar en ese tipo de situaciones. Guardar todo, deshacerse de una vez por todas de cosas que ya no nos sirven y transitar en ese camino que termina vaciando la última en nuestro nuevo hogar.
¿Pero qué pasa si es algo más divertido de lo que se aparenta? Moving Out nos quiere llevar por esta vía, en una aventura que tiene como principal fuerte su vertiente co-op para llevar a cabo las más alocadas e inverosímiles mudanzas.
La propuesta es desarrollada por Devm Games y distribuída por Team 17, una empresa que acobijó también a Overcooked 1 y 2, franquicia a la cual Moving Out se inspira bastante en su plano audiovisual así como también algunas de sus mecánicas, aunque con una jugabilidad y dinámica mucho más sencilla.
Bienvenidos a Packmore
La premisa argumental de Moving Out va a tono tanto con la estética de su propuesta como con el humor que maneja. Somos uno de los nuevos empleados de F.A.R.T. (Furniture Arrangement & Relocation Technician), una pequeña empresa dedicada al rubro de las mudanzas, tanto domésticas como empresariales.
Claro está, el objetivo del juego será ir realizando mudanza tras mudanza, para volvernos cada vez más reconocidos en la ciudad de Packmore y poder ser contratados para encargos más grandes y complejos. En el fondo de esta rutina laboral, se irá desempolvando un sutil argumento con ciertos giros en el camino que funcionan más que nada para darle un marco y contexto a las 30 misiones principales con las que cuenta Moving Out.

Empezaremos en pequeñas casas, con pocos objetos para llevarnos para luego ir aumentando en tamaño y cantidad los objetivos. No solo nos limitaremos a domicilios residenciales, pasaremos desde mansiones hasta fábricas e incluso algunos niveles sucederán en el mismísimo espacio, ¿cómo llega una empresa de mudanzas al espacio? Tendrán que jugarlo para descubrir el motivo.
Los conceptos y mecánicas del juego se van a mantener durante todo Moving Out y es su sencillez en lo controles lo que lo vuelve tan dinámico. Además de movernos (claro está) tendremos un comando para agarrar, que tendremos que mantener para mover o arrastrar los objetos, un botón para saltar y otro para arrojar los muebles si tienen un peso liviano. Es decir, el abc de títulos como el ya mencionado Overcooked pero si ninguna otra complejidad extra, como picar carne o cocinar, por ejemplo.
Los niveles de la campaña principal de Moving Out mantienen el mismo objetivo principal. Agarrar la cantidad de muebles indicados y llevarlos al camión de mudanza. La eficiencia y la calidad del servicio que ofrece FART son a su vez los despremendimientos de rejugabilidad que ofrece el título.
El espacio de cada escenario abarca más o menos las mismas dimensiones, pero su formato y diseño de interiores va cambiando constantemente y si le sumamos la verticalidad de varios desafíos (casas de dos pisos u oficinas), Moving Out pocas veces se siente monótono aunque el modus operandi siempre sea el mismo. Incluso tendremos ciertas misiones espaciales, donde la acción de transportar cosas nos llevará por situaciones extremas.
Por un lado, el tiempo que tardamos en hacer la misión, que se desgloza en una especie de calificación Oro, Plata y Bronce. Obviamente si nos pasamos de lo que de indica el premio de bronce no se nos dará por completado el nivel y tendremos que rehacerlo. La otra arista de su rejugabilidad son objetivos secundarios que se habilitan tras pasar el nivel por primera vez y son los que ofrecen una cierta frescura en las proezas. Las mismas van desde no romper vidrios, agarrar un item que no está dentro de los seleccionados o meter un doble con una pelota de basquet.
Todos los objetos que tendremos que mudar no se comportan de la misma manera en cuanto a sus físicas y presentan 3 diferenciaciones claras, pero son las que tenemos que tener en claro al momento de acotar los márgenes de tiempo y ubicación dentro del camión de mudanzas.
Estas los muebles simples, que son livianos, arrojables, se puede saltar con ellos y son fáciles de transportar. Son la variación más común que veremos dentro de Moving Out y funciona básicamente para hacer bulto en la cantidad de items para completar el nivel. Un escalón más arriba se encuentras los objetos frágiles, que mantienen las mismas características que los simples pero si se nos caen o los lanzamos se rompen y vuelven a aparecer en su ubicación de origen.
Como tercer y último tipo de objetos de mudanza se encuentran los muebles pesados (heladeras, sillónes, camas), estos requieren una mayor destreza de movimientos porque generalmente pasan de forma muy justa por puertas y pasillos, por lo que hay que calcular bien los movimientos para sacarlos hasta fuera del domicilio. Estos objetos son los que requieren la asistencia de otro jugador para moverlos con comodidad y es dónde florece el concepto de que Moving Out nació para jugarse en cooperativo y que soporta de forma local hasta 4 jugadores.
¿Qué pasa si estamos solos? De por sí nos llevará el doble de tiempo mover estos muebles pesados, pero el juego cuenta con unas herramientas de accesibilidad que permiten que la experiencia para un jugador no sea tan frustrante. Además de alivianar estos items, también se puede, entre otras opciones, extender el límite de tiempo para poder conseguir las mejores bonificaciones.
Toda la magia y divertimento de Moving Out se potencia de forma exponencial con el multijugador. Y si esto es una afirmación irrefutable, ¿por qué el juego no cuenta con un co-op online? Ni siquiera marcadores para competir por los mejores tiempo, algo que termina limitando la experiencia de Moving Out porque si bien sigue siendo divertido en el modo Un Jugador, pierde mucho de ese brillo y carisma que desborda la propuesta.
Además de las 30 misiones principales, el mapa de la ciudad de Packmore, el hub principal del juego que se puede recorrer con nuestro camión de mudanzas, cuenta con una serie de minijuegos, diferentes pruebas de habilidades y algún que otro momento de distención garantizado entre mudanza y mudanza.
Una simpleza visual reforzada por el poder de los colores
Los juegos Party no suelen caracterizarse por un nivel técnico ni gráfico que ostente el potencial de las actual generación de consolas. Sin embargo, Moving Out tiene un completo nivel de detalle de sus escenarios, donde cada rincón de los mismos están debidamente cuidados y reforzados con una paleta de colores que refuerza el concepto.
Por suerte, todo el hud es claro y poco invasivo, pudiendo marcar y desmarcar en la pantalla los objetivos de cada misión .
Conclusión
Si buscás una variante de juegos como Overcooked, Moving Out es una opción ideal. Es un juego hecho para funcionar y brillar en co-op, con una dinámica para coordinar y ser lo más eficiente ante cada mudanza tan compleja como irreverente. La diversión está prácticamente asegurada, pero es inevitable remarcar que la experiencia en solitario puede tener una falta de sabor en algunos momentos.