Los disparos de un arma de utilería también provocaron que el director Joel Souza terminara gravemente herido.
Episodios que no deberían pasar en los sets de rodaje de Hollywood y menos que menos repetirse. En las últimas horas un arma de utilería volvió a traicionar a quien la manipulaba y se cobró otra vida durante el rodaje de una película. Hablamos del caso de Rust, en el que Alec Baldwin mató a la directora de fotografía Halyna Hutchins con una bala que no debió estar ahí.
Ocurrió durante la tarde del jueves y trascendió durante las primeras horas del viernes. Según dio a conocer Deadline, durante un ensayo en el rancho Bonanza Creek Alec Baldwin, productor y protagonista de este western, tomó un arma de utilería y disparó sin saber que contenía al menos una bala real. La misma hirió gravemente al director Joel Souza y, lamentablemente, terminó con la vida de Halyna Hutchins cuando apenas tenía 42 años y comenzaba a formar su carrera en Hollywood.
“El elenco y el equipo está devastado por la tragedia de hoy, y envía sus mayores condolencias a la familia y seres queridos de Halyna. Detuvimos la producción de la película por tiempo indeterminado y estamos colaborando por completo con la investigación del departamento de policía de Santa Fe (New Mexico)”, comentó en un comunicado la producción de Rust, mientras que la policía agregó: “El Sr. Baldwin fue interrogado por los investigadores y puesto en libertad. No se hicieron arrestos ni hay cargos contra ninguno de los involucrados”.
Cabe recordar que un accidente muy similar terminó con la vida de Brandon Lee, hijo de Bruce, durante el rodaje de El Cuervo en 1993. Parece que de los errores no siempre se aprende.
