Fun Punch Games presenta Strikers Edge, un frenético juego que homenajea humildemente a los grandes arcade de la década del ’90.
Hace unos días les presenté el análisis de Timothy vs the Aliens, título que fue uno de los ganadores de los premios PlayStation Talents. Bueno, en esta ocasión vengo a traerles otro juego que tiene el honor de ser uno de los primeros consagrados de dicha celebración, marco en el cual Sony trata de darles un incentivo a las desarrolladoras indies.
Strikers Edge, desarrollado por Fun Punch Games, es un título de acción competitiva que combina la fantasía medieval con el “deporte” del quemado (dodgeball), llevando esta fusión a un adictivo arcade que tiene un gran atractivo tanto en el modo online así como compitiendo con un amigo en casa.
A jugar al quemado, de manera frenética.
El concepto de Strikers Edge es sumamente sencillo, pero no por eso deja de ser interesante. El juego tiene como único propósito adoptar el juego del quemado, esa entrañable actividad que seguramente todos han realizado durante nuestro paso por el colegio, fusionándolo con toques mágicos de estilo medieval.
En un mapa dividido en dos, tendremos que eliminar a nuestro rival en combates uno vs uno o dos contra dos (hay 2 contra 1 pero eso está limitado al modo historia) utilizando las armas que tienen a disposición 8 distintos personajes, que además cuentan con una habilidad especial.
Aunque a priori la mecánica del juego resulte bastante fácil, Strikers Edge nos obligará a estar concentrados en todo momento, e incluso la IA en su máxima dificultad es un desafío bastante complejo de superar.
Luego de pasar un simple tutorial, que nos explica cómo defendernos, atacar y recuperar energías, ya estamos listos para entrar en numerosos combates, ya sea dentro de sus 3 modos disponible: historia, combates online y combate local.
Strikers Edge refleja a grandes rasgos las grandes virtudes del arcade: partidas vertiginosas, necesidad imperiosa de tener dedos hábiles y reflejos de acero, ya que un descuido nos convertirá en blanco fácil. Para agregar una mayor emoción al título, el juego cuenta con un momento slow motion que se activa automáticamente cuando a unos de los participantes está cerca de morir y le pasa un proyectil cerca.
Los 8 personajes no solo se diferencian por su estética, sino que presentan distintas armas y habilidades especiales, que son el plus necesario que se adapta a nuestro estilo de juego. Algunos son mas ofensivos y tienen poderes más directivos, otros envenan al rival, y otros dañan menos pero su disparo tiene un rango de impacto más amplio.
Reducidos modos de juego
Como mencionamos anteriormente, Strikers Edge cuenta con 3 modos distintos. En las características offline, tiene un modo Historia que es bastante pobre y carente de contenido. El mismo cuenta con un breve prologo y epílogo para cada personaje, que cuenta su origen y propósito en esta aventura. Además de eso, cuenta con 4 peleas y listo; nada más. Entiendo que Fun Punch Games dedicó sus recursos al Online, pero ya que agregó este modo hubiese invertido algo más de contenido en esta arista porque se siente realmente innecesario.
El modo online nos permite enfrentárnos 1vs y 2vs2 en partidas al azar o invitando a otro usuario. Acá es donde el juego saca su mejor provecho y podemos enfrentárnos a rivales realmente competitivos. Las partidas que pude jugar antes de realizar este análisis fueron bastante fluídas y no tuve problemas de lag, algo que perjudicaría completamente a este tipo de juegos (como así también en los juegos de pelea).
Sin embargo, hay momentos en donde cuesta bastante encontrar una partida, y podemos pasar varios minutos esperando. Esto lleva, como consecuencia, a que el punto más fuerte que tiene Strikers Edge es en su 1vs1 offline, el modo que homenajea de manera fehaciente a los grandes títulos de arcade. Competir mano a mano con un amigo que está a medio metro tuyo le agrega ese plus y dinámica que hace de este juego una propuesta que siempre está bueno tener a mano en tu biblioteca de juegos para pasar un buen rato.
Más allá de esto, Strikers Edge carece de otro tipo de atractivo, y corre la posibilidad de que luego de jugar numerosas partidas pierda su diversión, ya que no cuenta con coleccionables, ni personalización de personajes ni algún modo extra para desbloquear.
Estética retro
Apelando a la nostalgia (un recurso más que valido que todas las empresas lo utilizan de vez en cuando), Strikers Edge tiene un estilo en 2d con un apartado gráfico con estética retro bastante bonito, que sumado a las animaciones de los personajes logran que visualmente sea atractivo y a la vez consecuente a la propuesta que Fun Punch Games propone. Se le puede reprochar la poca variedad de escenarios, pero va a tono también con el reducido roster de personajes para elegir. El sonido tiene esa onda noventosa que hace más llevaderas las batallas, pero que tampoco se destaca en ningún momento.
Un multijugador distinto
Strikers Edge es un título que no ostenta deslumbrar con su contenido, sino que apunta a una mecánica sencilla que atrapa rápidamente, y aumenta su atractivo si jugamos con amigos. Fun Punch Games, a pesar de las limitaciones en su propuesta y su limitada rejugabilidad, es una opción interesante para los que buscan una competencia diferente y adictiva.