Una nueva aventura para el hombre mono, eso es lo que traen David Yates y Warner con La Leyenda de Tarzán, un frenético film que apuesta fuerte y obtiene grandes resultados.
No es la primera vez que el icónico personaje creado por Edgar Rice Burroughs llega a la gran pantalla, pero esta vez lo hace con una historia diferente, La leyenda de Tarzán, algo así como una secuela de la leyenda original que tiene muchos más elementos de acción, sin despegarse de su espíritu aventurero.
La película nos centra varios años después de que Tarzán dejase la selva para vivir en la ciudad junto a su amada Jane. Ya convertido en una celebridad, abandona su nombre salvaje para heredar el legado familiar y convertirse en John Clayton III. Pero no tardará mucho en regresar a su tierra natal, esta vez como embajador de comercio, para descubrir que la invitación tiene segundas intenciones por parte del capitán belga Leon Rom.
La historia se cuenta con una mezcla de diferentes condimentos en cantidades exactas: Toques de romanticismo sin excesos, una trama atrapante que vuelve al pasado, solo lo justo y necesario, para recordarnos los primeros pasos del hombre mono y una gran cuota de acción trepidante que nos pondrá la piel de gallina en más de una ocasión. Esta es la combinación perfecta para no permitirnos parpadear durante los 109 minutos de duración.
En cuanto a los actores encargados de darle vida no hay nada que reprocharle, sino todo lo contrario. Los maestros Christoph Waltz y Samuel L. Jackson son, como siempre, para el deleite. Djimon Hounsou nunca falla, Margot Robbie demuestra una vez más que no es solo una cara bonita y Alexander Skarsgard, quien fue cuestionado en un principio, destaca por su sólida interpretación en la piel de Tarzán.
Para destacar también nos encontramos con una banda sonora que nos sumerge aún más en la inmensidad de la jungla y pequeños detalles en el protagonista, como sus cicatrices o deformaciones posturales de las manos, que fueron ignorados por versiones anteriores, pero que suman mucho en la profundidad del personaje.
No hay dudas de que el film cuenta con una excesiva edición digital y con algunas escenas que se alejan mucho de la realidad, pero estamos hablando de un hombre que se crío entre gorilas y se comunica con los animales, las circunstancias son inevitables.
‘La Leyenda de Tarzán’ es una gran superproducción que propone una nueva visión sobre un ya conocido personaje. La combinación perfecta de drama, aventura y acción harán que salgas totalmente satisfecho de la sala de cine, incluso con ganas de que haya durado un poco más.