Llega a la gran pantalla Operación Anthropoid, un film bélico que combina drama y acción para contarnos un importante hecho real acontecido durante la Alemania nazi.
Sobran las adaptaciones llevadas a la pequeña y a la gran pantalla sobre diferentes hechos ocurridos en el marco del nazismo. Sin embargo, el caso que narra Operación Anthropoid es inédito para el cine y deja en claro que no debió ser ignorado durante tanto tiempo.
El thriller de Sean Ellis nos cuenta el atentado llevado a cabo para matar líder nazi Reinhart Heydrich, el tercero en la línea de mando, quien fue conocido por ser el artífice intelectual de la Solución Final, el plan para exterminar al pueblo judío.
Cuando nos encontramos ante una obra del cine británico que habla sobre la Segunda Guerra Mundial, las ilusiones de alejarnos un poco del sensacionalismo hollywoodense afloran. Y Operación Anthropoid tiene claros matices del estilo inglés pero, sin embargo, también cae en recursos clásicos del cine norteamericano.
A pesar de contar con ese clima sobrio que tanto gusta a los amantes del cine europeo, cuenta con varias escenas de tiroteos propios del sensacionalismo y es ahí donde se hallan varios de sus mayores pecados. Frente a hechos verídicos, se espera cierto nivel de credibilidad, pero los tiroteos exagerados repletos de cartuchos descargados sin acertar ningún tiro nos alejan bastante de esa sensación que buscamos.
Más allá de esto, la trama se hace sumamente llevadera. Los diálogos cuentan con la complejidad justa y necesaria como para entrar en contexto, y varios momentos de tensión, que ponen los pelos de punta, alcanzan para entender la gravedad de los hechos.
Para encarnar a los personajes, el film cuenta con un elenco extraordinario. Destacan sus protagonistas: Cillian Murphy vuelve a demostrar su enorme versatilidad, parecería ser que no existe papel que le siente mal. Jamie Dornan, por su parte, se aleja de cualquier crítica negativa que le pueda haber caído en 50 Sombras de Grey, y nos entrega una performance enormemente profunda y totalmente creíble.
Otro de los puntos positivos de la obra es la ambientación. Pocas veces se vio antes, una década del 40 tan bien reflejada, tanto en los paisajes, como en el vestuario y el sonido. En ningún momento se te ocurre pensar que se trata de una película moderna.
Un poco de sobriedad inglesa mezclada con el estilo estadounidense, esa es la combinación que nos trae Operación Anthropoid. Una jugada que agradará al público en general, aunque no dejará conformes a quienes busquen el clima generado por un cine específico o por el otro.
Los cientos de miles de amantes de las narraciones de la Segunda Guerra Mundial la disfrutarán y muchos otros también. Varias escenas realmente valen la pena aunque no parece ser de esas películas que queden en el recuerdo durante mucho tiempo.