Con modestas mejoras, Uncharted: Legacy of Thieves Collection saca a relucir el potencial de dos grandes historias protagonizadas por Nathan Drake y Chloe Frazer.
Desde el arribo de la nueva generación de consolas, Sony profundizó su modelo de relanzar sus principales IP aprovechando todo el potencial que ofrece PlayStation 5. Este sentido de remasterizaciones no solo se apalanca en mejoras en su apartado visual, sino también mejorar su rendimiento y aumentar la inmersión de las experiencias en base al DualSense y el sonido 3D que ofrece los headset Pulse.
El año pasado tuvimos relanzamientos de peso como Ghost of Tsushima y Death Stranding, ambos bautizados Director’s Cut con las mejoras ya mencionadas más arriba junto con contenidos adicionales.
En esta línea, Uncharted: Legacy of Thieves Collection nos trae nuevamente las 2 últimas aventuras de la franquicia. Uncharted 4: A Thief’s End, el cierre de la apasionante historia de Nathan Drake, y Uncharted: Lost Legacy, un spin-off de escala más pequeña pero con el mismo potencial narrativo, gracias al propio empuje que ofrece la dupla de Chloe Frazer y Nadine Ross.
Sin embargo, esta colección de Uncharted esta un escalón por debajo a los Director’s Cut lanzados en 2021. No porque se jueguen o vean mal, sino porque en la comparación de propuestas se siente con gusto a poco, o a que podrían haber sumado algún contenido diferente que le sume valor agregado al bundle.
Más que un legado
La gran pregunta al jugar los primeros compases de este bundle fue, “¿cómo envejeció un juego de acción y aventuras AAA que ya tiene casi 6 años en el mercado?”, y la respuesta es un poco ambigua. Uncharted 4: A Thief’s End no vino a reinventar la rueda dentro de la franquicia, sino a poner el punto final a una historia que comenzó en 2007.
La despedida de Nathan Drake en esta entrega tiene un valor agregado por el peso emocional de los personajes. La aventura ya tiene una mochila emocional propia de años de aventura y de un desarrollo de los personajes prolongado y detallado. Hemos visto a Nathan, Sully y Elena conocerse, crecer, pelearse, distanciarse, explorar y saludar a la muerte en más de una oportunidad. A Thief’s End juega con nuestras emociones en cada momento y por eso hay una consenso general ante un título que reutiliza sus mecánicas hasta el hartazgo.
Aprovechando el potencial de en su momento PlayStation 4, Uncharted 4 busca maximizar toda su propuesta con entornos más grandes, puzzles más trabajados y escenas de acción mucho más grandilocuentes, pero es la misma fórmula (exploración – combate – cinemática) que ya viene acarreando durante las anteriores entregas.
No quiero dejar de mencionar a Uncharted: The Lost Legacy, un spin-off que en escala propone algo mucho más contenido y una narrativa más directa, mantiene la calidad argumental y momentos de acción a la altura de la franquicia – y no nos olvidamos del gancho de agarre, una novedad hermosa para la exploración de los escenarios -.
Dicho todo esto, no hace falta aclarar que el primer impacto de Legacy of Thieves Collection entra por los ojos, elevando la propuesta tanto a nivel visual como de rendimiento. Desde la configuración, y en todo momento pausando el juego, podemos acceder a los 3 modos que se presentan como la gran novedad en esta propuesta.
El juego dispone de tres modos, que a sus formas buscan dar una experiencia de juego diferente. Un modo “fidelidad”, con 4K nativos y 30fps, un modo “rendimiento” que escala a los 1440p de calidad y mantiene los 60fps; y para aquellos que tengan una tele o monitor que lo permitan tenemos el modo Rendimiento+, que exponencia la experiencia 1080p y una tasa de 120 fps.
A falta de un hardware que termine de acompañar para ver la experiencia en Rendimiento+, jugué ambas propuestas alternando sus dos primeros modos de visualización y las diferencias de cada uno están marcadas tanto en la exploración como el combate.
Los 4k nativos del modo “fidelidad” realzan todas las texturas, el diseño de los personajes, las capas de cada uno de sus escenarios y los minusiosos detalles que ostenta cada paisaje y locación. El trabajo de sombras en las cuevas o la luminaria de, por ejemplo, la cárcel, tienen un mayor nivel de trabajo y es realmente Uncharted como nunca se había visto hasta el momento.
Ahora, el combate toma un curso completamente más visceral cuando elegimos el modo “rendimiento”, aumentando las revoluciones de cada uno de los enfrentamientos, ya sea cuando nos ponemos a cubierto y disparamos, cuando tenemos que apuntar rápido mientras nos desplazamos o nos batimos a puños limpios contra los mercenarios de turno. Los 60fps se mantienen constantes en todo momento y dan ese plus a una parte tan trascendente en Uncharted como los tiroteos.
Si al principio de la nota mencionaba que esta colección se queda un escalón por debajo de las Director’s Cut lanzadas el año pasado, también se aplica al uso del DualSense, algo del que esperaba un trabajo mucho más detallado tratándose de un título first party. Gran parte de la respuesta háptica del joystick recae sobre el uso de los gatillos y no tanto de la vibración localizada, a diferencia de Death Stranding que logra manejar esto a la perfección. Por suerte, en donde el DualSense no llega sí lo hace los auriculares Pulse: el sonido 3d realza toda la experiencia, con una proyección sonora mucho más nítida y marcando los espacios de diálogosy disparos mucho más claros. Se puede escuchar con exactitud la zona o ubicación desde donde vienen los enemigos y eso es un plus real para toda la experiencia.
Conclusión
Uncharted: Legacy of Thieves Collection es la oportunidad ideal para revivir – o experimentar por primera vez – una de las aventuras más imponentes de los últimos años como lo es Uncharted 4: A Thief’s End, juego que tiene un disfrute especial si venimos disfrutando de las aventuras anteriores. La colección se completa con The Lost Legacy, un spin-off que demuestra que la franquicia puede subsistir tranquilamente sin que Nathan Drake protagonice la historia.
En la comparación de otras entregas, esta remasterización de Uncharted sale perdiendo por la carencia total de nuevos contenidos y una utilización del DualSense por debajo de lo que ya nos tiene acostumbrado otros títulos de PlayStation 5. Sin embargo, a nivel visual hay un retrabajo que potencian 2 juegos que en su momento ya asombraban de lo bien que se veían.
¿Legacy of Thieves Collection será el capítulo final de Uncharted? Yo creo que no.