La serie aprovechó su segundo episodio para ir directo al grano e introducirnos al mundo de las realidades paralelas. Finalmente el show nos muestra Tierra-1 y Tierra-2.
Sin muchos bombos y platillos Flash of Two Worlds nos introduce al juego de realidades paralelas que la serie nos tiene preparados para esta temporada.
Después de un inicio que se dedicó a cerrar tramas y preparar el terreno, dejamos al equipo Flash sorprendidos por la llegada de un hombre misterioso que vino a advertir sobre un nuevo enemigo.
Jay Garrick y las diferentes realidades.
Sin mucho preámbulo, el hombre que irrumpió Star Labs se presentó ante Barry y su equipo como Jay Garrick (Teddy Sears), un Flash de otro mundo que ante lo increíble de su afirmación intentó poner a todos en contexto explicándoles que su llegada ahí ocurrió cuando la “singularidad” que se posó sobre Central City hace 6 meses generó la apertura de varios portales que conectaron a la ciudad con una realidad paralela, otro mundo, donde existe otra Central City.
Así es como de golpe se nos presenta este otro lugar que conoceremos como Tierra-2, un universo habitual y conocido por los lectores de los cómics de DC pero que para la televisión es toda una novedad, sobre todo para una serie de superhéroes live-action. Así es como The Flash se atreve a desafiar su propia complejidad y a su propio público, intentando contar intrincadas historias de realidades paralelas que en las historietas son el pan de día a día, pero que en la pequeña pantalla es todo un territorio inexplorado.
Por eso es que aunque nos presentaron esta otra realidad, sólo pudimos ver tan poco. Progresivamente vamos a ir digiriendo toda la dinámica que ocurre en aquella Tierra-2 donde Jay Garrick viste el atuendo de Flash y se enfrenta a otros metahumanos, mientras le hace frente a su mayor amenaza: otro velocista conocido como Zoom.
Pero todo eso quedó atrás para Jay cuando fue abducido por uno de los portales creados por la “singularidad”, por el cual perdió sus poderes y llegó a lo que ahora conoceremos como Tierra-1. Un momento donde además pudimos apreciar el instante en el que su característico casco se coló a través del portal e hizo su aparición estelar en el final de la temporada pasada.
Ese fue el momento exacto durante el final de la 1era temporada en el Harrison Wells, al ver que un casco salía del portal y caía al piso, advirtió que esa era la “señal” para irse. ¿Conocía Reverse-Flash la otra realidad y lo que pasaría?
¿Quién es Zoom?
Durante el relato que nos presentó la otra realidad, descubrimos que ese otro velocista llamado Zoom tiene como objetivo convertirse en el ser más veloz que exista… en cualquier universo. Por esa razón estaría enviando metahumanos desde Tierra-2 a Tierra-1 para asesinar a Barry Allen.
Pero aunque su identidad se mantiene en secreto, quizá no lo sea tanto. Al final del episodio pudimos conocer que en Tierra-2, el Dr. Harrison Wells sigue con vida y es el director de Star Labs tal como lo era en Tierra-1. El mismo hombre que quiso acabar con Flash antes, tiene muchas probabilidades de ser el que se esconda tras la máscara de Zoom, con un plan mucho más complejo de lo que creíamos.
Las dudas de Barry.
La amenaza de Zoom y la aparición de este otro Flash que ofrece su ayuda para enfrentarla, despertaron en Barry el más sincero sentimiento de desconfianza. ¿Y cómo culparlo? Si el hombre que le enseñó a usar sus poderes, su mentor, resultó ser nada más y nada menos… ¡que el asesino de su madre!
Ante tal situación, no es de extrañar que Barry comience a mostrarse como ese héroe vulnerable que se protege forjando una personalidad solitaria y firme, pero que debe lidiar el hecho de que aún no puede cumplir su rol heroico en solitario por lo que permite que sus amigos le ayuden con su objetivo.
Por eso que, luego de varias pruebas e interrogaciones, accede a aceptar la ayuda que Jay Garrick le ofrece, en principio, para enfrentar a uno de los metahumanos de Tierra-2 que llegó a Central City.
Así es como nos encontramos con la primera situación en la que ambos Flash trabajan en equipo, retratando el excepcional momento con un guiño a la icónica portada del cómic donde ambos personajes hicieron su aparición por primera vez. ¡Ge-ni-al!
Por Eduardo Sánchez