Como corresponde, otra semana significa otro capítulo, este es Game of Thrones 6×02 : Home. Y esta vez tampoco va a ser suficiente uno solo, porque ya no podemos esperar a lo que va a pasar la semana que viene. ¡¿Qué es lo que él va a hacer?!… Pero no nos adelantemos, y vamos por partes.
Home, el nuevo capítulo consigue su nombre por la primera historia. Bran volvió, más poderoso que nunca, y sigue aprendiendo de la mano de este extraño personaje de negro la habilidad para ver más allá de su propio tiempo. Como si meterse en el cuerpo de su huargo Summer, o en la cabeza de Hodor ya no es suficiente para el legítimo heredero del asiento de Winterfell, ahora está viajando en el tiempo.
En su viaje llega a Winterfell alrededor de 40 años atrás (o algo así estimamos). En pleno entrenamiento de combate entre unos jóvenes Ned y Benjen Stark, a quienes rápido se les acerca Lyanna. Bran se da cuenta de la felicidad con la que todos convivían en esta época, y la razón de su sorpresa es que lleva tantos años viviendo entre guerras que olvidó como se veían los tiempos de paz.
La más grande sorpresa de esta visión sin embargo es que Hodor tiene otro nombre y puede hablar. Y además es súper caballeroso, ¿Qué está pasando? ¿Qué es lo que llevó a Willys, este chico de los establos con sangre de gigante, a volverse en una repetidora de Hodors? Probablemente pronto sepamos algo más de la historia de este semi-gigante.
Pero este hombre, el cuervo de tres ojos (a quien hace falta aclarar que también le cambiaron el actor, ahora es mucho más joven que en el final de la 4 temporada), que guía a Bran en sus visiones, y que ya lo llevó en muchas, no quiere que el joven Stark fantasee de más con estos viajes. Y deja en claro que son tan peligrosos como fantásticos. Pero debe haber un motivo ulterior para haberlo llevado a ese momento específico y para estar enseñándole estas cosas.
Mientras tanto Summer duerme, Hodor rompe palitos, y Meera no entiende mucho por qué están donde están. Sin su hermano Jojen para explicar qué está pasando debe ser complicado para ella soportar estar “haciendo nada” mientras tanto quilombo tiene lugar en el resto de los 7 reinos. Pero una niña del bosque la hace entrar en razón, ella también tiene un rol importante, tiene que ayudar a Bran cuando llegue la hora de dejar la cueva.
Bastante más al sur de donde está Bran tenemos Desembarco del Rey, donde Cersei sigue decaída por la muerte de su hija, y encima no la dejan ir al funeral. Sin importar el apoyo que pueda darle Ser Robert Strong (o como mejor lo conocemos, la montaña zombie) ella debe seguir las órdenes de su Rey Tommen.
En el funeral de Myrcella, Tommen y Jaime tienen una charla exageradamente paternal (Tommen es medio lelo al parecer). El comandante de la guardia real lo hace entrar en razón sobre la postura del rey para con Cersei, y le sugiere que pida disculpas. Jaime está excesivamente Lannister últimamente, y comete el error de exhibir su melena ante la persona equivocada. El alto gorrión no es una persona con la que se puede joder, y da la impresión que acá se va a venir el quilombo.
Tommen mientras tanto se acerca a su madre, y pide disculpas por lo que pasó hasta ahora. Deja en claro que es el Rey debilucho que Cersei tenía miedo que sea, pero al menos tiene el coraje para admitir sus errores, y pide la ayuda de su madre para ser un soberano más fuerte. Definitivamente una mala idea porque Cersei no es el mejor ejemplo de gobernante y probablemente quiera recrear a Joffrey.
Al oeste, ahora nos vamos a Pyke. La isleña ciudad de los Greyjoy de la que hace bastante no teníamos noticias. Acá nos volvemos a encontrar a Balon y Yara (padre y hermana de Theon respectivamente) discutiendo sobre cómo jugar el juego de tronos.
Recordemos que al mismo tiempo que Renly, Robb y Stannis se hacían llamar reyes bajo sus propias coronas, este tipo se la dio también de rey y la jugó de conquistador. Pero los hombres de hierro (habitantes de estas islas) no consiguieron mucho más que un par de puebluchos en el norte y que Winterfell ardiera hasta ser solo cenizas. Por eso Yara ahora volvía a su padre con las manos vacías y una propuesta que el “rey” Balon no podía permitir.
Pero con la suerte que tiene, papá Greyjoy sale un toque de su habitación (a echar un cloro o algo así) y se le cruza un tipo en el camino. Quien se esconde en las sombras es su hasta entonces perdido hermano (del que solo habíamos escuchado nombrar) Euron; un tipo que rápido nos hacen entender que está de la cabeza entre delirios de grandeza. Euron viene a quitarle el trono a su hermano, y para conseguirlo lo tira de un puente. Es una mejor muerte que la de Tywin al menos.
En consecuencia nos llevan al funeral de Balon, donde aparece un sacerdote del Dios Ahogado (este personaje en los libros es otro tío de Theon, pero acá no se dio ningún indicio de esto) que dice que la tradición de los hombres de hierro dicta que tiene que haber una asamblea de sucesión (lo más parecido a una democracia para poniente) donde se elegiría el próximo líder, y si bien Yara es hija del difunto rey, si quiere ganar le toca participar igual que los demás. El único que zafaría acá es Theon, pero entre que ahora es eunuco y que todos piensan que está muerto no tiene muchas chances. ¿O sí?
Theon escapó con Sansa y se libró de la mano de Ramsay gracias a los juramentos de Brienne y la asistencia de Pod. Pero ahora (en una escena extremadamente rara) decide que si bien tenía ganas de ir al muro junto a Sansa en busca de Jon, su destino ahora está en su viejo hogar (otro guiño al título del capítulo). Quizás llegue a tiempo para la elección de un nuevo gobernante en Pyke. Antes de que Euron haga cualquiera.
Ramsay mientras tanto está con su nuevo aliado Karstark (hijo de un aliado al que Robb decapitó hace un tiempo) en audiencia con Roose, su padre, cuando llega la noticia de que su nuevo hijo y legítimo heredero acaba de nacer. Roose de todas formas le dice a Ramsay que él siempre será su hijo legítimo, pero eso no es suficiente para el bastardo de Fuerte terror. No, tiene que matar a su papá, a su madrastra y a su medio hermano para asegurarse que él va a estar a cargo de Winterfell. ¿Será esto también un manotazo de ahogado para ganarse una alianza con Kingslanding? Después de todo, Tommen le dio la derecha a Ramsay para ser un Bolton legítimo. Y podría decirse que lo de Sansa fue todo idea de Roose.
Lo que es seguro es que ahora el loco este va a estar a cargo de la vieja casa de los Starks. Seguro se vienen cosas lindas (na mentira).
Del otro lado del charco, tenemos dos pequeños avances. Tyrion muestra en Mereen su fanatismo por los dragones (seguro una de las razones que lo convenció por seguir a Dany) y decide soltarlos para que vuelvan a comer y crecer saludablemente. Vale la pena aclarar que si esta serie fuese exclusivamente “Tyrion y los Dragones” sería igual de exitosa. Llama la atención cuanta confianza tienen estos bicho con el enano… Nunca lo vieron, tiene pinta rara y seguro que huele a vino y vómito; claramente no da una gran primera impresión, pero parece que los dragones son seres poco prejuiciosos.
En Braavos, la chica ciega que alguna vez supo ser hija de Ned Stark seguía mendigando hasta que vuelve a aparecer la chica con el palo y la re caga a bifes. Al instante aparece Jaqen H’ghar (o la minita vestida con su cara, quien sabe) y la intenta convencer de que le dé un nombre y vuelva a su vida como era antes. Pero Arya entiende que es parte de su entrenamiento, y dice que no; aun cuando le ofrecen recuperar la vista. Ahora volverá a escuchar las enseñanzas del dios con muchos rostros; y quizás se le asigne una nueva tarea.
Y bueno, solo queda una cosa. El muro.
La gélida tumba que guarda el cadáver del señor comandante y nuestro bastardo favorito (a menos que te gusten las cosas freeky que hace Ramsay). Parecía que también iba a ser el sarcófago de Davos y los amigos de Jon, hasta que aparece Edd con una horda de salvajes (Wun Wun al rescate motherfuckers) y salva el día; y de paso le mete el ego y discurso pedante por el… por la boca a Alliser Thorne.
¡A los calabozos forro! ¡Y llévenlo a Olly también por gato y panqueque!
Davos se acerca a Melisandre con un pedido, el mismo que todos queríamos que hagan desde que terminó la 5ta temporada. ¡Resucitámelo al pibe!
Pero Melisandre no es lo que era antes. El último capítulo dejó en claro que ella se siente en pelotas con su creencia (lo plantearon con una bien perversa “metáfora”). Después de ver a su rey caer, sus fuerzas se estaban acabando, y una tarea de esta magnitud está bien lejos de sus capacidades. Esto lo percibimos desde el principio del capítulo, el detalle de que está echada cerca del fuego, cubierta de pieles para recibir calor, cuando antes “la fe” la hacía mantener su calor, deja en claro que perdió la fe que antes la hacía tan poderosa. Pero más sí, dice, vamos a darle una chance.
Y ahí están todos, mirando, esperando; a la expectativa de que Jon dé un nuevo aliento. Pero nunca lo da.
Hasta que sí. Y todo se va al carajo.
Desde ahora, las verdaderas preguntas que todos nos hacemos son:
¿Qué van a hacer ahora? Jon después de morir, ¿tiene que mantener sus votos como comandante? O sea, la muerte es el punto en el que se termina el contrato; ahora que revivió podría fácilmente salir a buscar esposa, hijos y tierras. Que sen cuiden las chicas de Westeros.
¿Jon sigue siendo la misma persona? El otro personaje que vimos revivir hasta este ahora en la serie (ya que no hubo Lady Stoneheart) fue Beric Dondarrion, el famoso caballero relámpago. Un ex-aliado de Eddard Stark hasta que muere en batalla y es traído de vuelta por el sacerdote rojo Thoros de Myr. Después lo mata El Perro otra vez, y de nuevo lo reviven. Pero el caballero explica que cada vez que vuelve olvida parte de sus memorias y es un poco distinto. Si esto mismo le sucede a Jon, podría pasar que nuestro querido bastardo tenga una personalidad algo diferente de lo que esperamos.
¿Se habrá convertido en Azor Ahai (el príncipe prometido)? Quienes hayan estado atentos a lo que dice Melisandre sabrán algo de esta profecía; que dice que el héroe del Dios en llamas volverá de entre los muertos para salvar al mundo de una eterna oscuridad. La oscuridad serían los Caminantes Blancos, que a su paso bloquean la luz del sol. Ahora que está devuelta ¿Será Jon el encargado de devolver la luz al mundo?
¿Cuán diferente es de los Caminantes Blancos? Seamos honestos, sabemos muy poco sobre cómo estos llegan a ser esos monstruos (solo vimos la cosa esa del bebé). Pero sí sabemos que no pertenecen al reino de los vivos, y Jon podría ser lo mismo. Quizás los compañeros del muro que lo vieron muerto piensen así y lo saquen a patadas.
Honestamente son muchas preguntas que no se van a responder hasta el sábado. Así que…
¡¡Nos vemos después del próximo capítulo!!