Una casa encantada, un sádico manicomio, un templo de brujas y un circo. La serie creada por Ryan Murphy y Brad Falchuk ha alternado distintos escenarios. Con altos y bajos, pero siempre enfatizando una arista del terror, lo morboso y lo fantástico. Ahora, en esta nueva temporada, la acción nos lleva al misterioso Hotel Cortez, en el que sus habitantes guardan más de un lugubre secreto. Sin embargo, el mayor desafío en este nuevo año de AHS es la ausencia por primera vez de Jessica Lange, por lo que la expectativa es sumamente alta.
Pero vayamos al interior de este primer capítulo y desglosemos lo que ha dejado. Checking In Principalmente funcionó para mostrar algunos de los personajes que veremos a menudo en el hotel y la trama ha dejado entreverse un poco pero sin tantos detalles.
Kathy Bates asume el papel de Iris, la recepcionista del hotel, que en los primeros minutos deja claramente entendido que este lugar es más retorcido de lo que esperamos. Las primeras victimas serán unas inocentes turistas suecas, que por no perder la plata de la reserva de la habitación, terminan pagándolo muy caro.
Uno de las historias que más se detallo fue la del policía Alex Lowe, interpretado por Wes Bentley. Un devoto de su profesión, atormentado por un pasado que lo persigue. Su esposa no lo puede perdonar por la desaparición de su hijo hace cinco años mientras estaba bajo su cuidado y, aunque intentan seguir adelante junto con la otra hija que tienen, ese misterio sin resolver, sumado al dolor de la pérdida, llevan a Alex y a su esposa a tener una agonía latente. Algunas extrañas llamadas y unos sueños de índole premonitorios sobre su hija, inducen a John a armar las valijas y alojarse en el Hotel Cortez, donde cree que puede obtener más de una respuesta.
En cuanto a Lady Gaga, bueno, nos esperábamos muchas cosas de ella pero ¿Un vampiro? Ok, a ciencia cierta no podemos afirmar que de sea un descendiente del conde Dracula, pero ha quedado claro que ella junto a su “pareja” Donovan, encarnada por Matt Bomer, se alimentan de sangre humana. Y sumandole que se llama “La Condesa”, las alusiones son demasiadas. Lo que queda claro es que el papel de Gaga llegó para suplir la ausencia de Lange, y este papel siniestro y misterioso parece caerle muy bien.
Los pocos flashback que aparecieron durante el capítulo nos mostraron el trasfondo de algunas de las historias y una cosa quedó clara, las personas que entran al Cortez dificilmente logran salir. Una de esas regresiones nos lleva a 1994, en donde nos enteramos que Iris es la madre de Donovan, en esa época un drogadicto influenciado por Sally (Sarah Paulson en su papel más bizarro). La pareja entra al Hotel con la mera intención de drogarse juntos. El resultado es trágico: Él muere y la madre, que los había seguido, no tiene mejor decisión que tirar a Sally por la ventana culpándola del fallecimiento de su querido hijo. Pero pronto descubriremos que los muertos no quedan en ese estado, y ambos son revividos gracias a la Condesa. En ese momento entendemos por que Iris termina siendo la recepcionista del hotel, no quiere alejarse de su hijo nunca más.
Dos de las historias trascendentales de esta temporada aparecen cerca del final del capítulo. El primero es la aparición de Will Drake, un millonario con intenciones de comprar el hotel. Esto despertará el miedo en alguno de los habitantes y curiosidad en La Condesa, que tratará de mantener cerca a Drake para conocer sus verdaderas intenciones. El segundo hecho revelador es que descubriremos que La Condesa tiene dentro del hotel un grupo de niños (que al parecer también son vampiros), entre los que se encuentra ni más ni menos que Holden, el hijo desaparecido del oficial Lowe.
Cheking in tuvo la clara intención de marcar la pauta estética de esta nueva temporada, el ritmo para contar los hechos (muy similares a lo visto en AHS Coven) y la punta del iceberg sobre algunos personajes. Pero sabemos que esto recién comienza. Las puertas del Cortez están abiertas.