Uno de los villanos más odiados en Game of Thrones fue Ramsay Bolton, quien iba a morir de una forma mucho más sangrienta de lo que pudimos ver.
Game of Thrones no extrañó nada a Joffrey Baratheon. Ramsay fue su reemplazante en cuanto a lo que representa al villano más despiadado de la serie. Y no solo lo suplantó, sino que se ganó el odio absoluto de todos los fans.
Por eso, su muerte fue ampliamente disfrutada por los seguidores de la serie. Después de que Jon retomara el control de Winterfell, fue Sansa quien se encargó de liberar a los perros del propio Ramsay que, según él mismo reveló, no comían hace una semana. Así que los canes no tardaron en devorar a su amo, en una escena que sugirió más de lo que mostró.
Pero Mat Krentz, supervisor de efectos especiales de Game of Thrones, habló sobre la escena que iba a mostrar mucho más del bastardo Bolton siendo despedazado:
“Filmamos varias tomas de la misma escena. Nosotros trabajamos en una particularmente, en la que primero tomamos a la cabeza de Ramsay en pantalla verde, y luego a varios de los perros. Así, pudimos generar distintas secuencias en donde los perros le arrancaban la piel y la mandíbula al villano. Quedó genial, pero los productores eligieron ir por algo más sutil”.
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Extraña este hecho, teniendo en cuenta que no tuvieron ningún tipo de filtro a la hora de mostrar otras muertes. Probablemente fue solo un toque artístico por parte de los productores.
La séptima temporada de Game of Thrones, que ya está dando muchísimo que hablar, se estrenará entre marzo y abril del año que viene.